Hola, buenas tarde a tod@s.
Tengo dudas con respecto a algo, y me gustaría saber si algun@ de vosotr@s puede arrojarme algo de luz sobre este tema, ya que no me queda demasiado tiempo para solucionarlo.
Pues bien, os comento: sigo trabajando a pesar de estar embarazada de 29 semanas ( y, por lo que parece, la misma historia de siempre: pretenden que «me ponga de parto» trabajando).
Hace aproximadamente un año que soy oficialmente enfermera ( de ahí mi poquísima experiencia con respecto a lo que quiero contaros, a parte de que es mi primer embarazo ), y trabajo en la planta de un hospital, en turno rotatorio, y expuesta a varios riesgos.
Pero, a pesar de lo avanzado que está mi embarazo, hasta el momento nunca me había quejado, ya que la mayoría de molestias que he ido teniendo son totalmente normales si tenemos en cuenta mi estado.
Realmente siempre me ha sido difícil «quejarme» y «exigir» ciertas cosas de no verme realmente mal, así que, aunque es un trabajo tremendamente agotador ( tanto a nivel físico como mental y emocional ), he intentado continuar lo máximo posible.
Muchísimas veces me han dicho que por quien debo mirar siempre es por mi bebé y, aunque eso hago, mientras mi bebé estuviera sano seguía sintiendo que mi obligación era trabajar pues «lo que estás es embarazada, no enferma»… asi que no me parecía bien pedir una baja sin que realmente hubiera llegado el momento de no poder seguir.
Y por suerte hasta el momento todo ha ido bien. A pesar se que se me hacia bastante pesado, sentía que podía seguir sin problemas. PERO esto ha cambiado. Hace aproximadamente mes y medio, empecé a notar limitaciones que si me impedían hacer bien mi trabajo. Limitaciones que progresivamente han ido en aumento.
Hace un par de semanas mi supervisora me comentó que debía pasarme ya por salud laboral para que me valoraran ( fallo mío no haber ido muchísimo antes pero, como ya dije, tengo poquísima experiencia y no sabía como gestiona el hospital este tipo de situaciones. Yo pensaba que solo debía si realmente no podía continuar en mi puesto y, de necesitar la baja, sería la obstetra quien me la concediera o no. Por eso yo estaba esperando a que llegara el día que vuelve a verme mi obstetra. También decir que la culpa es totalmente mía, pero que la gestión del hospital siempre ha dejado muchísimo que desear…), así que eso hice, porque realmente si necesitaba que valorasen mi situación.
Pues ahora bien, todavía me quedan días de vacaciones ( vacaciones que cogí a conciencia ) pero, por lo que me han dicho, será un proceso bastante largo y que, seguramente, lo que haran es moverme a consultas externas.
Realmente no sé si es que me valorarán tras valorar primero mi puesto de trabajo ( si alguna de vosotros lo sabe os agradeceria la información ), pero es que está médica no ha mirado absolutamente nada de mi ni me ha preguntado cómo me siento. Solo que en qué servicio trabajo y mi FPP.
Y es que yo me pregunto ¿y mi alto riesgo de preclampsia? ¿y mis calambres y dolores musculares? ¿el lumbado/ciatica que siento a diaro? ¿mi malestar, mi pesadez y mi agotamiento extremo? ¿que sienta que me asfixio con la mascarilla en este calor extremo no es un inconveniente teniendo que llevarle durante horas? ( he llegado a pasarlo realmente mal por este motivo siendo que siempre he tolerado la mascarilla. Y en el hospital no se por qué está haciendo demasiado calor, a veces incluso los pacientes me salen con «febriculas» de asarse en sus habitaciones).
Puede que hace un mes no me hubiera importantado que ni siquiera se planteen la necesidad de darme una baja por riesgo en el embarazo, ya que me sentía medianamente bien, pero mi situación ha cambiado muchísimo este último mes y, tras esta conversación, mi cabeza hizo «click»: pretenden tenerme asi hasta casi el parto porque falta muchísimo personal y siempre intentan atrasar las bajas lo máximo posible. Y es que, por más que me mandes a consultas externas ¿dónde me pondrás? ¿dentro de una consulta sentada para que me duela más la espalda y se me hinchen aun más los pies? ¿teniendo que forzar la postura o inclinarme sobre una mesa/paciente para extraer analiticas o tomar constantes? Si apenas puedo moverme sin que me den punzadas en la zona lumbar ( y lo que me espera de aquí en adelante ).
Y más si pretenden mantenerme en mi planta, dónde no puedo ejercer adecuadamente, hasta que decidan algo… Imaginense solo si me tocase socorrer una hemorragia cereblar, tal como pasó cuándo todavia estaba embarazada, tritón mediante y con un lumbago que me deja encorvada cual jorobado de Notre Dame.
Y que decir que, embarazada de 7 meses (casi 8 ya para cuándo me toque volver) es el mejor momento para empezar en un servicio nuevo, delnque desconoces absolutamente todo ¿no creeis? Porque el estrés de que te muevan de un puesto a otro de forma alvitraria viene muy MUY bien…
Por eso quería preguntaros si sabéis cómo gestionan este tipo de cosas. ¿Te valora alguien después de valorar tu puesto de trabajo? ¿Es mejor hablar directamente con el obstetra o pedir directamente una baja por lumbalgia?
Si es que hasta mi médica me ha preguntado ya que para cuándo piensan darme la baja, pero tampoco sabe muy bien quien se encarga de esto.
Muchísimas gracias de antemano