Poder antiinflamatorio comprobado

Uno de los principales beneficios del aceite de CBD es sin duda su gran poder antiinflamatorio. De hecho, los tratamientos antiinflamatorios generalmente utilizados para aliviar a las personas que sufren de dolor crónico están hechos de opiáceos (derivados del opio). Aunque sean eficientes en la mayoría de los casos, estos opiáceos pueden generar efectos secundarios muy desagradables como adicción y náuseas, disminución del sistema inmunológico, etc. El aceite de CBD, por otro lado, además de presentar drásticamente menos efectos secundarios y con un riesgo mucho menor de adicción, reduce la sensación de dolor en el cuerpo gracias a los efectos analgésicos que genera. Además, el aceite de CBD podría ser útil en la lucha contra varios tipos de dolor como el dolor muscular, articular, pero también los dolores relacionados con la menstruación, las migrañas, etc.

Aceite de CBD para combatir el insomnio

Aunque la planta de cannabis es conocida en sí-misma por su acción beneficiosa contra los trastornos del sueño, el aceite de CBD es particularmente adecuado para combatir el insomnio, ya que el THC (otro cannabinoide) puede afectar la calidad del sueño. Gracias a sus efectos relajantes y ansiolíticos, el CBD sería un excelente facilitador del sueño sin poseer los efectos psicóticos del THC.

Propiedades antioxidantes

El aceite de CBD también tiene propiedades antioxidantes que le permitirían proteger la piel de las agresiones ambientales tal como la contaminación. Por lo tanto, es excelente para combatir el acné y la piel seca, pero también contra el picazón, hinchazón y enrojecimiento relacionados con el eczema y muchas otras condiciones inflamatorias que afectan a la piel.

Además de estas propiedades beneficiosas mencionadas anteriormente, el aceite de CBD también tiene muchos otros beneficios médicos como antiepiléptico, anticonvulsivo, antiestrés, antipsicótico, etc.,