CÓMO SHEIN ME SALVÓ LA VIDA.

Bueno, vale, puede que el título sea un poco exagerado, pero qué queréis, soy Cáncer. Salvarme la vida como tal puede que no, pero todo lo que comportó el descubrimiento de esta página web de chollazos, ahora archiconocida mundialmente, ayudó mucho en mi proceso de autoaceptación en el que hoy en día sigo trabajando.

No sé cuántos años hace que la conocí, pero muchos. ¿Unos 6 quizás? Recuerdo un post en alguno de los perfiles bodypositive que empezaba a seguir (me jugaría las dos manos a que fue en Weloversize) en el que hacían referencia a la colección de tallas grandes que vendía esta tienda de ropa online, por aquel entonces poco conocida. Justo había terminado la carrera y tenía curro, por lo que también algo de dinerito, así que me decidí a visitar la página. Y ahí fue cuando mis días cambiaron…

Shein

Hasta ese momento, y como otras muchas personas de talla grande, vestía de prestado. Eso quiere decir que vestía con la ropa que encontraba de mi talla en tiendas físicas y que me podía permitir económicamente. Es decir, no existía la posibilidad de crear un modelito, un lookazo o ir a la moda. Las marcas habían decidido que las gordas no teníamos derecho a escoger nuestra ropa. Que debíamos conformarnos con las 4 cosas carísimas que traían para nosotras. Daba igual si tenías 20, 40 o 60 años, las prendas eran las mismas.

He de decir que un par de años antes de conocer a Shein, había descubierto Kiabi, quien en su momento también me había hecho muy feliz (bueno, y me sigue haciendo). Por ese entonces ya traía cosas de talla grande por un precio muy bueno y una calidad estupenda, por lo que hacía un tiempecito vestía menos de prestado que habitualmente. Sin embargo la variedad de productos es incomparable con Shein, quien ha revolucionado mi armario y arrasado con mi cartera (y la de medio mundo a la vista de lo famoso que se ha hecho en los últimos años).

Al principio tenía muchas dudas acerca de comprar ropa online, sin embargo el hecho de que en cada prenda especifiquen las medidas tanto de la pieza como de la modelo en sí, facilita mucho las cosas y al final una se vuelve una experta. Tuve algunos fails, como todas supongo, y algunas telas parecían más para un disfraz que para ponértelas en el día a día. Pero entre que la marca ha ido mejorando el producto y yo he ido depurando mi técnica, actualmente mi armario es una gozada. Variedad de jerseys, camisetas, chaquetas de entretiempo, vestidos, faldas, pijamas, bañadores, etc.

Shein

Otra de las cosas que me gustó mucho de Shein es la posibilidad de comprar ropa interior de algodón. Por mi talla, en tiendas físicas únicamente encontraba ropa interior de lycra por lo que los veranos, llena de rozaduras, eran un horror (por aquel entonces aún no habíamos descubierto la crema antirozaduras del Decathlon, que daría para otro post).

Además de todo eso, tienen una variedad muy amplia de lencería súper sexy, así como bañadores y bikinis, para que te sigas sintiendo atractiva a pesar de tus kilitos de más.

Como veis no os he contado nada que seguramente no conocierais a estas alturas de Shein. ¿Por qué considero entonces que me cambió la vida? Como os dije al principio el descubrimiento surgió a partir de empezar a seguir a páginas bodypositive, principalmente Weloversize. El hecho de ir leyéndolas cada día fue aumentando la confianza en mí misma. Empecé a recorrer el camino de la autoaceptación y a empoderarme. Y eso conjuntamente con encontrar una página donde puedes comprar ropa con la que te sientas identificada y salgas a la calle sintiéndote la mujer que quieres ser no tiene precio. Porque sí, la ropa influye mucho en la autoimagen que tenemos de nosotras mismas, y si estamos empoderadas y encima nos sentimos guapas y sexys… Somos imparables.

Así que gracias Shein y gracias Weloversize por mejorar mi vida. Os debo unas cañas.

@maripluff