El pasado lunes por la noche, Alberto Chicote estrenaba su nuevo programa para Antena 3: Dietas a examen. Estar a dieta vende tanto que ya ocupa los prime times de las cadenas más famosas de nuestra televisión. Tal y como Chicote explicaba al comienzo del programa, en España once millones de personas tienen sobrepeso u obesidad, y más del 40% de la población ha hecho una dieta al menos una vez en su vida. El propósito de este programa es analizar algunas de las dietas más famosas para ver, primero, si son efectivas y, segundo, si son peligrosas para la salud.

Chicote, cuyo sobrepeso es evidente, quiere perder uns kilos. Para ello, ha decidido analizar científicamente cuatro dietas (la crudivegana, la de proteínas, la de días alternos y la paleolítica), y se ha puesto en manos de una endocrina que, después de haberle hecho varias pruebas médicas, ha decidido que lo mejor para él sería seguir la dieta mediterránea por intercambio, que no deja de ser un nombre precioso para denominar a la dieta de endocrina de toda la vida de 1750 kcal. diarias en la que ningún grupo de alimentos queda excluido. Esta dieta ha de ser completada con 10.000 pasos diarios de ejercicio.

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Por lo tanto, este programa de televisión se basará, simplemente, en seguir a varias personas que quieren perder peso, ver qué métodos usan para perderlo y ver cómo este cambio en su alimentación afecta a su organismo. Un poco aburrido para lo interesante que podría hacerse un tema como este, que ahora está más de moda que nunca. No obstante, le reconozco el mérito de informar, puesto que, como hemos denunciado miles de veces en Weloversize, en el mundo de la nutrición y las dietas hay muchos vendehumos que solo se preocupan por nuestro dinero, no por nuestra salud, y han conseguido confundir a la población que ahora, más que nunca, está muy desinformada sobre cuáles son los mejores métodos para perder peso.

Finalmente se demuestra que la dieta más efectiva es la de Chicote, esta dieta mediterránea en la que todos los alimentos están permitidos pero en la que no se deben sobrepasar las 1750 kcal. diarias, acompañando este cambio en la alimentación con ejercicio regular y moderado. Una de las personas que comenzó la dieta de proteínas tuvo que abandonarla por recomendación médica porque estaba poniendo en riesgo su salud y el resto logró bajar de peso, aunque la doctora les explicó que todas sus dietas tenían carencias que a la larga les pasarían factura.

Las ideas que deberían quedarnos claras después de haber visto este programa son:

  • Antes de ponerse a dieta hay que consultar a un médico y hacerse una serie de pruebas.
  • Si durante el periodo en el que estás a dieta comienzas a sentirte mal debes acudir a un médico, no todas las dietas «sientan igual de bien» a todo el mundo y nunca es acertado jugarte tu salud por perder unos kilos.
  • No pasa nada por saltarte la dieta PUNTUALMENTE, los excesos se pueden compensar.
  • El ejercicio es fundamental.
  • No hay que tener miedo a probar cosas nuevas.
  • No conviene alargar en el tiempo las dietas que restringen determinados grupos de alimentos que son básicos. Cuatro-cinco semanas debería de ser lo máximo.
  • No hay ninguna dieta mágica, cualquier dieta requiere un esfuerzo.