Stranger Things, The Handmaid’s tale, Big Little Lies, Twin Peaks y bien de Juego de Tronos… series, entre otras, que tienen los premios, el presupuesto, la promoción y la legión de fans a sus pies. Sin embargo, la verdadera revolución en forma de serie no nos ha llegado ni homenajeando a las pelis americanas de los ochenta ni no dejando títere con cabeza. Desde mi punto de vista, la serie del año, la que más impacto ha causado, y además, sin ser siquiera el 2017 su año, ha sido Paquita Salas.
La sombra de Paquita Salas será ancha, pero también es alargada. Aunque esta serie española se estrenó en el verano de 2016 en la plataforma Flooxer, su estela ha llegado hasta finales del corriente año dejándonos, seguramente, el mejor regustillo de todas las series que hemos visto este año. Y de las que no hemos visto también, porque es que hoy en día da igual que no veas una serie, a poco que entres en las redes sociales ya se te pega algo.
Porque vivimos una nueva época dorada de las series de «televisión», aunque las mejores sean las que no se emiten en los canales nacionales. Estamos aturdiditos de contenido, ya no sabemos ni qué ver, pero una cosa os digo: la única serie que de verdad hay que ver es Paquita Salas. Y ahora os cuento por qué:
– Por Paquita Salas, porque es un personaje como nunca se había visto antes. Ante todo, Paquita es una mujer muy trabajadora, curranta como ninguna, de estar dedicada por completo a su trabajo y sacrificarse por lo que haga falta para conseguir sus objetivos.
– Porque Paquita Salas es una señora que quiere vivir en el 2017 pero no le sale. El mundo ha cambiado drásticamente en los últimos años, sobre todo desde la popularización de Internet, y aquellas que se formaron y brillaron en los 90… en la actualidad están más perdidas que una gorda buscando una XL en un Pull and Bear. Paquita al menos tiene excusa: ella no es una mujer de este tiempo. Porque las que supuestamente sí lo somos estamos tan perdidas como ella.
– Y así llegamos a Magüi, la compañera de aventuras de Paquita. Magüi es otro personajazo. Una chica de hoy en día que debería saber cómo funcionan las cosas pero que la pobrecita, muy espabilada, no es, así que no va a dar pie con bola. Pero la vas a querer mucho y te vas a sentir muy identificada con ella.
– Porque, ante todo, esta es una serie sobre sentimientos. Sobre relaciones de trabajo, de amistad, de amor… Sobre el esfuerzo y sobre el fracaso. Una serie de darse golpes, de caerse, de enfrentarse a los miedos y de ponerse hasta arriba de Donuts porque ya no puedes más y necesitas desahogarte, para luego poder remangarte la faja y volver a empezar.
– Porque es comedia continua, un no parar de reír, no hay una línea de guión que no esté en su sitio. Si entras en el mundo de Paquita Salas Management no vas a querer salir. Es verdad que no es un humor para todo el mundo y que hay a quien esta serie no le hace gracia. Yo que sé, hija, tiene que haber de todo, pensad que hay gente a la que no le gusta Quim Gutiérrez. Pero yo no vengo aquí a juzgar, yo vengo aquí a recomendar, y el humor de Paquita Salas es 100% recomendable y necesario.
– Y lo más importante: ¿os sabéis eso de que sabe más el diablo por viejo que por diablo? Pues como Paquita es ya una mujer madura tiene mucho, pero mucho, que enseñarnos sobre la vida.
(Y si me permitís, un bonus track. Porque es que resulta que estoy enamorada de uno de los actores de Paquita Salas desde que lo vi en esta serie. Es mi segundo crush de Instagram en orden de importancia, así que os casco una fotico de su belleza y ya me voy)
Puedes ver Paquita Salas en Netflix. Y deberías ponerte con ella YA.
