Acabo de leer que esta temporada pretenden que dejemos de pintarnos la raya del ojo. WHAT. Ni hablar, habéis de saber que yo por mi eyeliner, MATO. Y creo que aquí, en Weloversize y en general, somos legión las fans incondicionales. El eyeliner es para nosotras más que una raya encima del ojo, ¡es un estilo de vida! 

Si un día me veis sin el eyeliner puesto es que algo me pasa. Enferma, triste. Mega vaga. Ebria, sola, devastada. ALGO.

Cada una se lo pinta de una forma, más o menos gorda, sin rabillo, arriba y abajo, solo arriba. Hay un montón de formas pero en general, tenemos la nuestra y así la llevamos siempre. Yo team, solo arriba y con bien de rabillo ¿vosotras?

Y claro está, cada una tenemos nuestros truquis y nuestras herramientas favoritas (aquí, gel y pincel team). Y podemos pasar un buen rato hablando sobre cómo nos lo pintamos cada una. Y también podemos pasar un buen rato intentando igualar un ojo a otro. Desmaquillar y empezar de nuevo. Yo tengo comprobado que cuando mejor me sale es cuando lo hago a la primera, si empiezas a igualar, ya la has liado. 

El día que nos queda chuchurrío sentimos que nos falta algo y encima ya como mires una foto de Rebeca, te echas a llorar. Ella no tiene días de esos.

Aunque haya invertido un buen rato, no falta en mi bolso (junto con el pintalabios rojo) el rotu para retocar por si se me va (que nunca pasa). O si me toco el ojo. O si lloro. O sea lo que sea que pueda pasar, pero nada sería más terrible que verme con la raya del ojo medio borrada. Oso panda.

Y hay dos cosas que a muchas nos pasa casi a diario: que nos llamen Amy Winehouse (always en nuestros corazones) y que cualquier persona nos pregunte ‘¿cómo te pintas la raya del ojo?’. Cajeras, señoras funcionarias, la panadera, la dependienta del Pull y gente por Instagram. MENSAJE : QUE RAYA USAS (el hola, por favor y el gracias están sobrevalorados parece ser).

Además, no sé si os pasará también a vosotras (seguro que sí) pero gran parte de mis iconos estilísticos, han llevado también la raya del ojo perenne. Y ellas me influyen mucho más que cuatro modeluquis, todas iguales y qué fíjate tú casi todas tienen la misma forma de ojo y ojos claros. Pues ¿cómo no van a estar bien sin eyeliner?

No sé en qué piensan estos señores de la moda, pero para nosotras el eyeliner, no es una moda, ni una tendencia en maquillaje, es una de mis señas de identidad. Empecé a pintármela con 16 años, he invertido mucho tiempo en mejorarla y se ha ido adaptando a mi estilo y edad. ¡Pasamos de modas, nosotras somos la moda!