Siento debilidad por Naomi Shimada, la naturalidad de sus poses me tienen conquistada desde que trabajara como modelo para Asos Curve. Los ojos achinados, una sonrisa perenne y esa cara de niña traviesa enamoran a cualquiera.  Personalmente, me ofende un poco que se la considere una modelo plus size, yo la metería en el saco de las inbetweenies de cabeza, pero la tiranía de la industria de la moda es así.

Anoche me enteré por su Instagram de que había concedido una entrevista para un blog de Jezebel en la que profundiza en detalles de su vida y su postura ante la industria y gracias a la cual he descubierto que mi Naomi tiene una columna mensual en InStyle UK (como dice una famosa canción de Los Planetas: «Nunca me entero de nada»). Según ella misma cuenta empezó siendo modelo de tallas normales cuando era muy jovencita, hasta que con 20 años su cuerpo cambió y no fue capaz de mantener su peso, entonces se reinventó en modelo de tallas grandes porque, aunque lo intentó, porque como ella misma dice «no se puede luchar contra la naturaleza».

En su opinión la industria de la moda nos hace vivir una falsa realidad en cuanto a cánones de belleza se refiere. Pero las cosas poco a poco van cambiando (siempre más despacio de lo que le gustaría) y cree que es muy positivo el papel de Internet y de la blogosfera en este punto. Naomi Shimada es modelo plus size porque usa 6 tallas más de lo que es considerado normal para una modelo, pero es consciente de que el público no la ve así porque es una de esas modelos que está en tierra de nadie. Sueña con que llegue el día en que todas las modelos, de diferentes tallas, formas y tamaños, puedan realizar los mismos trabajos sin tener que jugar con etiquetas estúpidas y así poder representar de verdad la variedad de mujeres que existen. En definitiva, hacer de la moda algo más inclusivo.

 

Esta entrevista demuestra que, además de guapa a rabiar, es lista y sensible a las imposturas de la industria de la moda, porque la conoce desde dentro y en profundidad y no se le caen los anillos por hacer una crítica constructiva sobre su trabajo. Es heavy user de las redes sociales (soy muy fan de su Instagram), donde se expresa con libertad y demuestra tener un gran sentido del humor. Es consciente de su papel protagonista en el proceso de cambio del paradigma de la belleza y se siente muy afortunada de poder poner su granito de arena. Yo es que la amo locamenti.