La Pelo: ¡tu youtuber de confianza!

 

Llevaba ya tiempo queriendo escribir algo sobre @lapelo.oficial porque cada vez me tiene más conquistada. Y sobre todo ahora, que la tía se ha plantado en plena gala de los Goya con un vestido de 2 euros del mercadillo y unos pendientes de cartón…¡y lo mejor de todo es que iba fabulosa!

Para quien no la conozca, La Pelo es una youtuber sevillana, del barrio de Torreblanca, que comenzó haciendo vídeos sobre manualidades pero que, si por algo me ha enamorado, ha sido por su personalidad: no me importa de lo que sean sus vídeos que siempre me apetece verlos. Esto suena un poco loco pero siento que es como esa amiga con la que quieres quedar para lo que sea todas las semanas porque su simple compañía te hace sentir bien.

Y esto es curioso porque yo nunca me he sentido muy identificada con influencers ni soy muy seguidora del mundo de las redes pero ¿cómo no me voy a sentir identificada si está cumpliendo mis sueños uno a uno? No solo ha ido a los Goya (aunque sea sentada donde Cristo perdió el mechero) sino que ha salido en el propio anuncio de la gala, ha publicado un libro, viaja sola y hace unos meses cruzó el charco para ir al coliseo de Puerto Rico y ¡asistir a un concierto de Wisin y Yandel! Verla emocionarse y defender públicamente el reguetón como una música que viene de los barrios (como ella, como yo) y que se enfrenta a mogollón de prejuicios (que, en mi opinión, lo único que esconden es una fobia a los que venimos de abajo) fue realmente inspirador.

También ver cómo bromea con sus abuelos, que comparte ropa con su madre, que enreda a su padre para que le ayude con temas de bricolaje, cómo se planta con su carro de la compra en el mercadillo, como disfruta de la feria…son cosas que yo también hago en mi día a día y, por primera vez, las veo reflejadas en la pantalla.

¡Ah! ¡Y su naturalidad! Se que el mundo de las redes se aleja mucho de todo lo natural pero es una gozada verla en pijama, probándose ropa sin prejuicios de que veamos su cuerpo y riendo a carcajadas (por favor, no os perdáis las tomas falsas del final de sus vídeos). Y todo esto sin perder ni una pizca de su acento, de sus expresiones ni de la forma de hablar que tenemos por el sur y por la que tantas veces nos hemos sentido juzgadas o ridiculizadas.

No sé si ella me leerá pero desde aquí aprovecho para darle las gracias por todas las cosas buenas que me hace sentir y por todos los días de mierda en los que sus vídeos me han arrancado una sonrisa. ¡Me declaro pelower forever!

Orquídea