Hola, Iván, te leo y tu historia me resulta muy conocida (parece broma, pero también conocí un Iván con tu edad y exactamente en la misma situación, pero de esto hace ya 3 años).
Lo hemos hablado mil veces, el casi se había dado por vencido con el tema, resignado a pensar que nunca encontraría a nadie a su medida.
Pasaba una época muy mala y todavía se machacaba más, pues no conseguía entender «qué tenía de malo».
Voy a hacerte un spoiler: tiene sus defectillos (como los tenemos todos), pero lo que más tiene es mala suerte y poca paciencia.
No podemos prever cómo van a salir las cosas, ni pretender seguir el ritmo que llevan todos los demás, lo importante es no perder la esperanza.
Llegará tu momento, no te machaques más. Sólo intenta mostrarte como eres sin darle demasiada importancia a eso, pues créeme si te digo que al final la primera vez es un mero trámite.
Sé que es más sencillo decirlo que vivirlo, pero con el tiempo verás que lo de menos era «cuándo», «por qué» y «por qué otros lo tienen más fácil».
En el caso del Iván que yo conozco el «cuándo» vino al «conocerme» a mí (teníamos amigos en común y nadie se habría planteado que pudiesemos tener algo juntos, ni siquiera nosotros. Hemos tenido vidas muy diferentes, pero a día de hoy funcionamos maravillosamente como pareja), hizo un cambio de chip y las cosas fueron rodadas.
Él dice que yo «lo salvé», yo dudo quién le ha venido mejor al otro en su vida, no hay día en el que no me sienta afortunada por tenerlo a mi lado.
Con todo esto te quiero decir: deja que las cosas fluyan, no te estanques, todo llegará. No será ni pronto, ni tarde, será el momento exacto en el que tenga que suceder, y no va a cambiar por mucho que te autofustigues…
¡Un abrazo muy fuerte y para adelante! :)