Acabo de terminar de ver una película en Netflix que si lloro un poco más o me siento un poco más identificada con la protagonista pues igual me deshago y me muero y ya está.
¿Sabéis quién me la recomendó? Mi prima pequeña de 12 años. Estaba súper pesada subiendo a su instagram stories muchísimas fotos de la película y claro, a mí se me hacía raro que subiera fotos de una gorda, porque ella todo lo que sube son niñitas perfectas dignas de papel protagonista americano, así que le hablé y le dije ‘¿quién es esa chica tan guapa?’.
‘Ay prima, es la protagonista de mi película favorita, la tienes que ver, que te va a encantar y el chico es mi novio, así que no te lo pidas, que es mío’. Pues nada, había que hacerle caso a la niña, entré a mi perfil, la busque y me la puse y sí, es una comedia romántica adolescente protagonizada por una chica grande, alta y gorda, pero lo mejor de todo es que la chavala TIENE MUCHÍSIMO AMOR PROPIO.
Es inteligentísima y lo sabe, en ningún momento alude a un continuo ‘tengo que adelgazar’ y vemos a una chica no normativa siendo feliz con su vida, con las inseguridades que tenemos todas, que las dudas que tenemos todas, pero también con las cosas bonitas, con las cosas que nos encantan, con las cosas que nos hacen ser nosotras. Y yo solo podía pensar una cosa: ojalá haber crecido con películas como esta.
La película tampoco tiene mucho más que lo que ya os he dicho, chica conoce a chico, se enamoran y, obviamente, tienen sus problemas para llegar a lo que todos queremos: que se haga posible. Además no trata solamente de amor, también hay amistad, familia y drama adolescente, cómo me gusta un buen drama adolescente.
Como toda película tiene sus más y sus menos, pero qué maravilla poder ver algo que se salga de la norma, qué maravilla que mi preciosa prima de 12 años tenga la posibilidad de admirar a alguien que no sea Hilary Duff, Lindsay Lohan o Amanda Seyfried (soy de los 90, que se note). Qué bien que a pesar de ser una rubita delgada de mayor quiera ser como Sierra Burguess, qué bien que normalicemos las cosas, qué bien que haya cosas bien entre todo lo que tenemos mal.
La película me pareció lo más, de verdad de corazón, aunque hay cosas que desentonen un poquito, no deja de ser lo que es y lo que te venden, drama adolescente. Con las redes sociales como protagonistas, como no podía ser de otra manera, con la actualidad más pura donde conoces a un chico por una aplicación y tienes que enfrentar a la realidad, enseñarle cómo eres. (No es exactamente así, pero no quiero haceros spoilers).
También diré que mi little prima no tiene un pelo de tonta, que al prota de la película también me lo pido yo. Porque vamos, menudo jodido bombón de chaval, a todas las colaboradoras de WLS nos lleva locas y tenemos claro que si tuviéramos 12 años sería el niño con el que nos forraríamos todas las carpetas de nuestra vida.
Al chaval ya lo había visto antes en otra película del mismo estilo también en Netflix y también recomendada por mi prima pequeña: ‘a todos los chicos de los que me enamoré’. La cual también me gustó muchísimo, pero no tanto como la de Sierra. La prota tampoco es la típica muchacha americana y eso es bien guay, si os gusta el rollo del cine adolescente, os encantará muchísimo.
El caso, a lo que vamos, si aún no te he convencido para que veas la película de ‘Sierra Burguess es una perdedora’, aquí te dejo el nombre del chaval del siglo: NOAH CENTINEO.
Definitivamente me peleé con mi prima pequeña, porque es mío.
Ay os voy a dejar otro gif de regalo, que le quiero mucho.
Y un último.
Ya paro, pero podría no hacerlo nunca.
Ved la peli.