Buenos días,
Ayer no fue un buen día y acabé explotando por la tarde noche de una manera que no me gustó, nunca me había pasado y quería saber si alguna le había pasado o si soy una m. de madre que es como me siento.

Os pongo en contexto, ayer ya desperté con dolor de cabeza, rogué al cielo que no fuera migraña y que se me pasará durante el día, pero no, en el trabajo lo pasé fatal, antes de salir del trabajo acabé vomitando y con gafas de sol las cuales no me quité hasta la hora de ir a dormir, porqué cualquier resquicio de luz parecía que me fuera a derretir la cabeza.
Fui a buscar primero al pequeño al colegio por qué sale a las 16:50, él ya intuyó que algo me pasaba cuando me vio la cara así que me saludó y no me dijo varias veces que quería ir al parque, le dije hoy no y ni rechistó.

Fuimos a buscar al grande que salía a las 17:00h, cuando le vi la cara supe que en contra de lo que necesitaba que era un poco de paz, iba a ser una tarde dura y así fue, esto lo cuento para que se entienda lo del final, no para rellenar, mi hijo mayor es muy perfeccionista, en casa estudia y sabe que si vemos que se esfuerza pero no aprueba o saca un 5(que para él es el fin del mundo), no pasa nada miraremos como aprobar el siguiente de otra manera y ya está, el problema es ese que él mismo sabe que se le da bien estudiar y se impone una nota, y si no la consigue tenemos drama.

Ayer le dieron el examen de matemáticas, sacó un 6’5, cuando él había calculado que iba a sacar un 8, cosa que le parecía mal ya de por si, estuvo todo el camino quejándose, que si tendríamos que haberle dejado dormir más tarde para estudiar, que si iba hacerse el dormido y estudiar, por qué tiene hoy examen y la nota tenía que ser si o si un 9, le dije que primero íbamos hacer a comprar que merendará tranquilo y ya está.

Ya está no, estuvo controlando el tiempo que tardábamos en comprar, como si la cola la pudiera controlar yo y ese fue el primer chillido que pegué, le dije que se callará que se comportará como una persona y esperará que yo no tenía una varita mágica para hacer desaparecer la cola, porqué luego esa es otra la gente cuchicheando, sin saber se podría apuntar a macaramé o solucionar su vida antes de mirar la ajena pero bueno.

Llegamos a casa, el pequeño aún no tiene deberes porqué va a I5, así que se fue a su cuarto a jugar con los playmbil, mientras el mayor, no paraba de repetirme 24 veces por minuto que le preguntará el temario del examen de hoy para organizarse y saber si estudiaba primero o hacía los deberes, le dije que fuera haciendo lo que quisiera que yo antes de que llegará su padre de trabajar quería tener la lavadora puesta y ayudar a su hermano a ducharse o que se fuera duchando él y así adelantábamos.

Y no hubo manera, que no, que no me ducho, antes de hacer lavadoras pregúntame que me tengo que organizar para sacar el 9 y fue en ese momento, peté.

Le dije que me importaba poquísimo la nota, que me encontraba mal, que si no veía que eran las 19:00 y llevaba gafas de sol, que hiciera algo de provecho en vez de darme por saco, que su hermano no me había dado tanto el coñazo como él porqué había captado que me encontraba mal y que si me tocaba las narices más, me iba a la cama ya y se buscaba la vida, hasta que llegará su padre de trabajar, que estaba harta de tanto drama por un 6’5, que estaba super bien y no merecíamos tal martirio, a saber la que nos esperaba si un día suspendía.

Y lloró, pero yo me encontraba tan mal que le dije que llorando tenía que estar yo y me fui de nuevo a vomitar. Cuando salí mi marido ya había llegado y se encontró el berenjenal, pero al verme la cara lo entendió todo, así que me dijo que duchará al pequeño que él mientras hacía la cena preguntaba al mayor y que si hacía falta luego me fuera a la cama, que él ya pondría la lavadora o se pondría hoy.

Fui a buscar al pequeño y me tropecé con un juguete, yo nunca le digo nada si no que vigile que nos podemos hacer daño al tropezarnos con ellos, ayer le dije que a la próxima se quedaba sin juguetes porqué se los tiraría todos, los recogió y se metió en la ducha.

Al salir yo no podía con mi alma y me fui a la cama sin cenar, por lo visto estuvieron hablando luego los 3 sobre lo que había pasado y entendieron los peques que no era mi día y que necesitaba descansar.
Esta mañana al despertarnos les he pedido perdón porque me comporté de forma ruin a mi parecer, me han perdonado, pero yo me siento la peor madre del mundo y no sé como quitarme ese pensamiento o si es justo que lo tenga.