No sé por qué nadie tiene que decirte si está bien o mal, porque realmente eso es problema tuyo y de tu pareja, pero yo he pasado algo igual estos dos últimos años. En mi familia somos muy de hacer reuniones, vernos mucho, hasta el punto de que soy hija única y mis primas son como mis hermanas. Pero en la familia de mi pareja es todo lo contrario.
Cuando dijimos que nos íbamos a casar, sus padres no mostraron mucha alegría, es más el padre pareció hacerse el tonto, como el que no se ha enterado, una de emis tías que estaba delante, se alegró mucho más que los.padres del novio.
Y es que hay gente para todo, en este caso, son una familia en la que el padre controla el dinero, a pesar de que la madre tiene su propio trabajo, y mientras ella no puede comprarse un vestido porque «a su marido no le gusta», él se gasta el dinero en casas y terrenos, que en total tienen 5.
Pues cuando llegó el momento de ir organizando la boda, que tuvimos tiempo porque la tuvimos que aplazar,hubo problemas con su familia…
Mi madre, que es viuda y no es que tenga un sueldo por las nubes, nos dijo que ella pagaba a los invitados de nuestra familia y amigos, nos ayudó con todo, incluso a comprar y hacer los detalles de los invitados, se ha gastado más de 8.000€ que era lo que podía aportar. Ha pagado más de lo que debería simplemente porque sabe que nosotros no tenemos mucho dinerillo en la cuenta, incluso estábamos dispuestos a pedir un préstamo y ella no nos dejó, prefería pagarlo de su bolsillo (suerte que mi boda fue muy sencilla).
Por otra parte, los padres de mi ahora marido, le dijeron esto «Te damos los 8.000€, pero te regalamos 3.000 y lo demás lo sacamos de tu futura herencia»….yo no estaba delante cuando dijeron eso, pero lo dijeron. Cierto es que tienen 2 hijos más, que una ya está independizada y con trabajo fijo, pero ¿que se case tu primer hijo y digas eso? Fué muy fuerte, y mi pareja no dijo nada por no molestar a sus padres, y esa condición se aceptó, sin yo tener muy claro lo que le habían dicho. Después de un tiempo, el hermano cumplía años y mi marido quería llevarle una tarta, lo que es celebrar el cumpleaños de tu hermano con él, pero el niñato, de ya 30 años y matemático, osea que se supone que debería tener las neuronas bien puestas, llamó a mi marido por teléfono, para decirle que era un aprovechado y un chulo y que no quería saber nada de él…lo cual fué aún más fuerte e hizo que termináramos devolviéndole el dinero a los padres porque no queríamos problemas. No sé qué le habrán dicho a ese niño para que se pusiese así, pero eso no se le.hace a un hermano. Además no sé dignó a ir a la despedida de su hermano, y por lo visto nadie de los suyos podía, así que se vió con familiares míos y amigos que tenemos en común, pero ya está. Por suerte se divirtió que era la idea.
Aparte de esto, la hermana cuando dijimos que nos casaríamos se mostró muy ilusionada, hasta que dijimos que sería un viernes por la tarde, porque al tener que cambiar la fecha por el virus no se podía otro día. A raíz de ahí, ella dijo que quizás no podría ir a la boda de su hermano porque no le daban días, porque no se los podía pedir …hay que decir que ella es profesora de instituto en París, pero no creo que se negaran a darle un sólo día por la boda de su hermano….Total que al final no vino, y el hermano estuvo toda la vida medio perdido y sin relacionarse con nadie. Y en cuanto a los padres, ellos pasando como siempre, que ni siquiera se enteraron del baile de novios que hicimos, y en ningún momento el padre nos preguntó qué tal iban los preparativos, la madre sí pero muy superficialmente, ya que sabíamos que no podíamos decir los inconvenientes porque ellos no se iban a gastar un duro en ayudarnos, no tenían interés, y siguen sin tenerlo.
La boda fue en junio y tras estas adversidades, conseguimos hacer un evento medianamente barato para lo que cuesta una boda, y lo suficiente sentimental para que llegara a todos los corazones que se dejaron llevar por ella. Fue un evento genial, y a pesar que los padres y el hermano de mi marido no estaban «prácticamente presentes» en la boda, porque estaban sentados por ahí y no se movían, los demás familiares tanto míos como suyos, nos apoyaron, bailamos y nos divertimos mucho. Pero tiene coj**s que una persona tenga que verse dejada por su familia en un evento tan especial…
Actualmente la cosa con ellos sigue igual… El padre hablando de sus tierras y plantas, la madre de sus tornerías espirituales, y el hermano sin aparecer, quizás a veces viene a saludar pero no mucho más.
La moraleja de esto, es que no esperes nada de quién no se interesa por ti ni por quien amas, sea quien sea. Qué os apoyeis el uno al otro, y aunque sea muy difícil, no pongas a parir a su familia delante de él, por mucho que se lo merezcan.
Si tenéis que recortar gente, es difícil pero tendréis que hacerlo, y si podéis con toda la gente genial. Obviamente tendrás que tragarte a sus padres en tu boda, peor tranquila,si no se interesan por la boda no creo que hablen mucho. Si no quieres estar con ellos en la mesa, siempre puedes hacer la organización de forma que estéis solos tú marido y tú en ella, dos por lo visto se hace mucho ahora.
Perdón por escribir tanto pero tu historia me ha inspirado para contarte la mía.
Mucho ánimo y paciencia.