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Casi 30 y sigue durmiendo con sus papis
Malditas Apps de ligar, cuanto sufrimiento dais a veces… Conocí a un chico de 27 añitos, para 28. Era bastante simpaticón, se le veía bueno y además tenía cara de pillín, cosa que me pone mucho.
Fuimos hablando y decidimos quedar. Nos lo pasamos bastante bien en nuestra primera cita, por lo que hubo otra, y otra… hasta llegar a la quinta. No me olvidaré nunca de este número porque me soltó lo mas grande, y fue cuando decidí no volver a quedar jamás con él.
Habíamos estado follando y justo cuando terminamos, se acurrucó a mi lado en mi cama. Me dijo que mi colchón le parecía muy cómodo y me preguntó qué modelo era. Le dije donde lo había cogido y me contestó: “Se lo diré a mis padres, nos toca cambiar el colchón, nos levantamos con la espalda rota”. Entonces le dije que lo que querría decir es que sus padres se levantaban con dolor de espalda, pero NO amiguis… me contestó que se despertaban así los 3, porque dormían juntos normalmente.
Mi cara era un poema, pero mi mente me decía que había algo que no cuadraba ahí. Le dije que si es que estaban haciendo reformas en su habitación para estar durmiendo con sus padres, o que pasaba. Su contestación fue que no, que les gustaba dormir juntos y que así lo habían hecho siempre, y que además, no tenían calefacción y así en invierno se daban calorcito los tres.
Mi mente, no sé si porque es perversa o por lo surrealista de la situación, empezó a imaginarse cosas turbias y no aptas para menores, y me dio todo mucho mal rollo.
Intenté ser lo más cordial posible, pero le dije que claramente era algo que no entendía. Que sus padres necesitaban privacidad y que él estaba ya cerca de los 30 y también la necesitaba. Él no se lo tomó muy bien, y me dijo que es a lo que estaban acostumbrados y que no tenía nada de malo dormir así con sus papis.
Yo no quise decirle nada más, le dije que le respetaba, pero sinceramente, se me fueron todas las ganas de seguir quedando con él. Vi un complejo de Edipo extraño que me llevaba a pensar que seguramente, sería uno de esos hombres que se dejan mangonear por sus padres todo lo que quieren y más. Así que, ¡sayonara baby!