Adelgazar, para muchas de nosotras, no es fácil.
Llevo toda la vida queriendo perder peso, perdiéndolo y recuperándolo. Celebrando cada kilo menos y culpándome cada vez que comía algo no permitido.
Y hoy, por fin, he descubierto que comerme media tableta de chocolate o una hamburguesa forma la misma parte del proceso de adelgazamiento que cenar una ensalada. No es un error, no es un fallo, no es una recaída. Solo es eso, una parte más del proceso, igual de importante, igual de necesaria.
Y cuando digo que lo he descubierto hoy, lo digo de forma literal. Hace escasos 5 minutos me acabo de dar cuenta. Después de años de terapia, de libros, de análisis, de acumular información… no me preguntéis por qué pero por fin mi cabeza ha hecho click. Y estoy muy contenta, por eso quería compartirlo con vosotras. :)
¡Besos!