Antes que nada debo poneros en antecedentes:
Conocí a mi novio hace tres años en unas jornadas organizadas por mi empresa en su país. Desde entonces mantenemos una relación a distancia en la que intentamos vernos lo máximo posible, aunque los 10000 kilómetros que nos separan hace que no sea tan a menudo como nos gustaría.
Hace algo menos de un año conocí a un chico en mi ciudad y nos hicimos muy amigos en seguida, porque tenemos muchas cosas en común y nos gusta pasar el tiempo juntos.
El problema viene porque creo que lo estoy usando como un novio de reemplazo. Me explico: hago todas aquellas actividades que haría con mi novio si viviésemos en la misma ciudad, ir al cine, salir a cenar, quedarnos hablando hasta las tantas de la noche, etc (todo menos la parte sexual). Además, para más preocupación, me he dado cuenta que cada vez que quedo con él me arreglo más y me pongo más guapa, sonrío cuando me llega un mensaje suyo y ese tipo de tonterías.
En resumen, que tengo un novio oficial a distancia y un amigo-amor platónico.
No se si me estoy metiendo en un berenjenal del que no voy a saber salir y me va explotar en la cara o si por el contrario, es normal que intente suplir la soledad de la distancia y es muy probable que no vaya mas allá de una amistad platónica.