No puedo dejar de llorar.
Tu has hecho que mi autoestima esté por los suelos, que no me sienta suficiente, has echo que salga una parte obsesiva, ansiosa y tóxica de mi que odio, no me reconozco y no me gusta como soy ahora mismo.
Lo nuestro fue una de las peores decisiones de mi vida, salté de una relación de siete años a tus brazos sin ni siquiera comprobar si estabas dispuesto a cogerme.
Al principio todo fue fácil, los dos decíamos que no queríamos una relación, disfrutábamos de nuestra compañía, nos queríamos…o eso creía yo, pero sin darnos cuenta nos vimos metidos en una relación, en una bonita relación muy consolidada según tus palabras y yo en aquel momento me sentía la persona más feliz del mundo porque no era capaz de imaginarme algo mejor, claro está que tu no, pero no eras lo suficiente hombre para decírmelo.
Un día todo estalló, tuve que ser yo la que lo dijera, tu te distanciaste, estabas como enfadado, notaba que esquivabas cosas que antes parecía que te gustaban como era dormir conmigo, de eso hace ya tres meses desde que decidimos que lo mejor era darnos un tiempo.
Pero la verdad es que en este tiempo, las cosas han ido y venido cuándo a ti te daba la gana, si me querías besar me besabas, si me querías abrazar lo hacías y el día que decidías que había que dejarlo todo me dejabas a mi, comiéndome las ganas de besarte y llorando, siempre por dentro y a veces por fuera, porque como quieres que entienda tus idas y venidas.
Primero fue que me dejabas porque no sentías lo mismo que al principio, después que me querías de una manera más estable y más madura.
Después que amigo, después que amigos especiales, ahora ya ni amigos.
Y después quieres que no piense que he sido un juego, pues cariño este juguete se ha roto y nunca más vas a volver a jugar con el.
Te dije mil veces de romper toda relación, y tu me llamaste extremista y te negaste a dejar de hablarme y al final siempre lo mismo, vuelta a empezar. Lo que he tardado en darme cuenta es que tu no sabes lo que quieres, pero desde luego no es a mi, es cierto que me has aguantado mucho, pero yo a ti también y ya me he cansado.
Se perfectamente que pierdo a la persona a la que amo, y a mi mejor amigo, en realidad a mi único amigo, pero a veces es mejor estar sola…
Te enfadas conmigo porque según tu no termino de aceptar que solo somos amigos, pero realmente piensas que dejas las cosas claras, hace días fuiste tu el que me besaste, el que me abrazó mientras dormíamos, el que me cogía de la mano y me miraba con esa cara de tonto mientras conducía, pero claro, después soy yo la que se confunde.
Pues bien, yo ya tengo las cosas claras, no me quieres ni me has querido, para ti lo nuestro solo ha sido una diversión, una persona a la que recurrir cuando te sentías solo o aburrido como aquella semana que pasamos como si de unas vacaciones se trataran… y después soy yo la que se confunde.
Ojalá pudiera decir que te odio, pero estaría mintiendo, ojalá te valla muy bien, se perfectamente que no tardarás ni un par de días en olvidarme así que no creo que me eches de menos, espero que pronto se solucionen todos tus problemas y seas muy feliz.