Hasta hace muy poco no me atreví a hablar de esto, pero sin comerlo ni beberlo, me vi en una «relación» (lo pongo entre comillas porque no fue una relación de pareja) con un psicópata (en palabras de mi psiquiatra). Tras meses de vaivenes, subidones, bajones…. Todo ha terminado bruscamente con el saldo de abusos emocionales, agresión sexual y un final feliz a base de ghosting.
He sacado algo muy bueno de todo eso, que es que he pedido ayuda para romper con el patrón que sigo de relaciones tóxicas. Pero tengo la ansiedad disparada, tengo tantas emociones contradictorias que no sé cómo manejarlas. Me tengo que atar los dedos para no escribirle y le echo de menos, a pesar de que sé que esa persona que echo de menos, no existe e realidad.
Me siento fatal por haberme dejado engañar, manipular y maltratar así y aún así, seguir queriéndole. Sé que se me pasará, pero es TAN duro.
Hoy encima tenía un día especialmente malo y he intentado quedar con mis amigos y todos estaban ocupados, así que aquí estoy, en casa dándole vueltas a la cabeza y sin parar de llorar…