Tú eres otra listilla más que quieren que le paguen la boda otros. Que tú no tengas valor de invitar a quien realmente quieres tener en tu boda es TU problema. Por eso se llama invitación. El resto lo que hacéis es ser unas buitres y vender entradas de vuestra boda, entonces tened decencia de no llamarlo invitación. Evidentemente yo pongo un precio ESTIMADO no tengo porqué pagar ni el cubierto entero si no me lo puedo permitir es que estaría bueno. Si invitas a la gente esperando a cambio que te la paguen ya por lista yo no querría ir, aunque fuese a pagarlo igual. CASARSE ES UN CAPRICHO si no tienes personalidad o valor de decidir a quien quieres tener realmente a tu lado,te aclaras pero no cobres entrada. Alucino.

Por más que intentes justificarte, no, no tienes razón. Yo me casé, invité a tres primos carnales y dos no, dejé fuera a toda esa gente tipo «tía de mi madre» que tú crees que se va a disgustar (y que a mí me la trae floja), y de mi grupo de amigos invité a los cercanos, a tres que veo de Pascuas a Ramos, no.
Y no, no me casé hasta que tuve el dinero para poder pagarlo nosotros. Varias personas no nos dieron dinero y nos DIO IGUAL, porque lo teníamos todo cubierto.
Así que tu boda para quedar bien, te la pagas tú.

Créeme que a esos invitados quedabien estarían más contentos si no les invitas. Hoy en día que te inviten a una boda es un MARRÓN. Aunque tenga capacidad económica, porque te tengo que pagar el cubierto? Lo mismo me apetece regalarte un día de spa para los dos, o cualquier cosa que se que les pueda gustar, pero no no, mejor el dinero. Pues mira, si no tienes el dinero no te cases a lo grande. Porque encima somos clones todos casandonos iguales.
Antes se regalaban cosas que necesitaban para la casa porque empezaban una nueva vida juntos, pero ahora ya viven juntos. Si quieres la boda de cuento de hadas y el fotógrafo y todas las pijerias esas pagatelo TÚ, y sino no me invites.

Hola! Espero no ofender a nadie con lo que voy a decir a continuación pero es mi opinión. Si esa pareja decide finalmente invitar a la tía del pueblo con la q no hablan sólo porque invita a la tía con la que se ven todas las semanas y son hermanas; si invita a los primos con los q apenas se mandan un WhatsApp en Navidad; si invitan a las mejores amigas de la mamá porque a ella le hace mucha ilusión…..es «capricho» de esa pareja por quedar bien de cara a la galería. Cuando nosotros nos casamos teníamos muy claro q a la boda se invitaba a la gente q realmente queríamos tener a nuestro lado. Y si fulano o mengana se enfadaba por no estar invitado/a era cosa suya. Nos parece muy bien q sean 3 hermanos pero si hay 2 con los q no hay relación llegados al punto d no conocer a una de las partes, por qué deberían sentirse ofendidos?? Ni ellos ni sus parejas e hijos deberían. Es más, en mi caso llevo MUCHOS años sin tener relación con mis padres(pero esa es otra historia)y recibí «avisos» de q si no invitaba a mi madre, había gente muy importante para mí q sí estaba invitada q no vendría y sabes qué?? Que sentí mucho no tener a esa gente junto a mí en ese día tan importante y especial, pero no iba a tener cerca a alguien a quien no tenía ni quería tener en mi vida. Como conclusión decir q si una pareja invita a X tendrán q valorar si pueden afrontar el gasto independientemente de si esos invitados cubren o no. Si cubren, bienvenida sea esa ayuda y si no…..🤷🏻‍♀️

Te equivocas, la boda si es un capricho de los novios cuando es para quedar bien. Te puedes casar solo con la gente necesaria, no con medio pueblo y el otro medio de tu futuro marido.
Porque te aseguro que pagar un mínimo de 150 euros, que es lo que se suele regalar para quedar bien, por pagar el cubierto eso es un capricho de los novios.
También se puede hacer convites en sitios más baratos, y no veo que ninguna pareja lo haga pq todos quieren tener y ser más que tu primo el del pueblo al que no conoces pero fuiste a su boda, y tu no puedes ser eso… o tener el mejor restaurante pq Pepita de los Palotes lo hizo en otro similar y tú quieres que sea mejor todavía.
Eso es querer justificar una boda por todo lo alto.