Éramos compañeros de trabajo, una tontería llevo a otra, una cena, cuatro copas y nos liamos, yo no sabía que tenía novia, él era muy celosos en el trabajo con su vida privada, de hecho salvo una compañera, nadie supo nunca nada.
Sus idas y venidas me mosqueaban, pero estábamos en el trabajo y había que disimular, entonces lo llevábamos en secreto, poco después me confesó que estaba con alguien pero que lo iba a dejar porque quería estar conmigo.
La cosa se alargó más de lo que me hubiera gustado, y cada vez estaba más agobiada por la situación, por ser la otra y por tener que llevarlo en secreto y admitir sus idas y venidas. Al final dejó a su novia y lo hicimos público, vamos que se supone que éramos una pareja normal.
De casualidad, los dos dejamos el trabajo, con lo cual ya sólo teníamos relación personal, la profesional quedó atrás.
Los primeros meses, pues ya sabemos, tonterías mil y todo muy bonito y muy en una nube, pero mi cabeza a veces le daba una vuelta de más a todo y si de repente llegaba más tarde, no me cogía el teléfono y cosas normales que todos hacemos, yo ya empezaba a dudar si estaría haciendo lo mismo que con su ex y ya sería la otra.
Llegaron los celos si, soy de las que piensa que la gente no cambia, simplemente modifica temporalmente su comportamiento y de verdad que había veces que no tenía claro dónde estaba ni con quien y sus respuestas me empezaban a sonar a las que escuchaba cuando estaba conmigo.
No sé por dónde tirar, porque me niega todo y lo creo pero a la mitad.