Ahora la amargada eres tú porque hace las cosas que a ti no te dejaba hacer… ¿Le has dicho lo que está haciendo? Porque si solo te quejas, no lo hablas con ella y no estableceis las normas de mutuo acuerdo pues no vais a arreglar nada. Y si llegas a tal punto que no la soportas pues tendrás que buscar otro piso… vamos que no eres la primera que se cambia por problemas de convivencia.