Hola a todas! Os escribo porque, desde hace más de un año, estoy viviendo una situación que me esta siendo muy difícil manejar, y acudo a vosotras para ver si alguien ha pasado por alguna experiencia similar y sabe cómo manejarlo.
Hace un par de años empecé una relación con un chico que tiene un hijo de 7 años de una relación anterior; el lo pasó francamente mal con su llegada al mundo (no estaba planificado y mi chico en esa época apenas tenía 20 años) y su relación ha sido dura desde el principio; con el paso de los años, poco a poco, ha empezado a afianzar su relación con su hijo, contando conmigo como apoyo para ayudarle en este proceso.
Conocí a su hijo cuando ya llevábamos un año de relación y, una vez pasada la timidez inicial, fui creando un vínculo el niño, pero todo esto se ha visto tremendamente afectado desde el momento en el que mi pareja ha decidido reclamar la custodia compartida del niño. Desde entonces, vemos como se ha hecho un gran ejercicio de lavado de cerebro sobre el niño por parte de su familia materna: que su mamá es más importante que su papá, que su papá es malo por que dejó a su mamá por mí (ojo al dato, que fue la madre la que terminó la relación y pasaron 5 años desde que la pareja se deshizo hasta que yo conocí a mi novio) y, lo que me tiene en vilo: el niño afirma que no puede quererme… porque estoy gorda.
Pero no me lo dice con maldad, con sorna o de manera hiriente, lo dice con total y absoluta inocencia. No hace más que preguntarme que si no sería mucho mas feliz si «desengordara» la tripa, que sería mejor si estuviera delgada, incluso llegando alguna vez a decirme que «no puede aguantarlo». La cuestión es que yo mido 1,70m, peso 85kg y es cierto que tengo algo de sobrepeso pero, desde luego, no es obesidad. No hace más que compararme con su madre (la cuál es monitora de gimnasio) y, por más que intento explicarle que cada cuerpo es diferente y que yo soy feliz con el mío, no parecer querer (o no poder) entenderlo.
No sé como manejar, por supuesto, su rechazo tan radical a mi persona, dado que a mi ya se me está empezando ha hacer bastante cuesta arriba el rol de «madrastra gorda», pero también me asusta de sobremanera que el niño pueda llegar a desarrollar un trastorno alimenticio en el futuro.
¿Alguien ha pasado por una situación similar a esta? ¿Qué me podéis aconsejar?
Muchas gracias a todas y muchos besos!