Hola chicas, he descubierto el foro hace poco y me gustaría comentar mi situación a ver qué opináis.
Hace un mes, empecé a hablar con un chico, (amigo de un amigo, con el que ya me seguía en redes), lo típico, primero instagram, luego whatsapp.
Al principio hablábamos mucho (hablo de quedarnos hasta las tres, cuatro de la mañana), tonteábamos lo justo, lo suficiente como para ver que había interés por ambas partes. Durante un par de semanas él quería quedar (propuso muchos planes) y al final nos decantamos por ir a cenar con dos amigas que teníamos en común.
La cena fue un poco desastre (yo estaba bastante nerviosa y eso suele volverme bastante «brusca»), pero seguimos hablando, volvimos a quedar otro día a solas y esta vez fue mucho mejor, pero no hubo ningún tipo de roce o beso, a partir de ahí la cosa empezó a enfriarse un poco, quizás porque coincidió con las vacaciones y él no está pendiente del móvil durante sus salidas. Nos mensajeamos muy muy poco hasta la noche de Fin de Año, en la que «despertó» un poco y me dijo que quería verme, parecía que volvía a ser el del principio. Al final no nos vimos porque yo me retiré pronto de la fiesta y él seguía en casa de un amigo (Avisado estaba de que yo me iba pronto), pero siguió tonteando hasta que yo me acosté. A día de hoy no hemos vuelto a hablar (solo para confirmarme ayer, 1 de enero, por la tarde que estaba encamado con gripe).
Ha cambiado totalmente el ritmo y me preocupa que haya perdido el interés, también el parecer muy pesada (Y no hablo sólo de mi sobrepeso). No sé si me he emocionado mucho y debería tomármelo con más calma o dar esto por perdido, aunque he confirmado que había (o hay) interés por ambas partes, pero que él no quería nada serio; este cambio me hace replantearme las cosas ¿Creéis que es solo por las fechas tan señaladas y que todo volverá a su cauce? ¿O debería pasar de él?.
En redes sociales sí me sigue la pista (Stories de Ig).
Un saludooo