Primero de inútil nada, has estudiado algo que por la razón que sea no te dio trabajo simplemente la hostelería no es lo tuyo y ya si no estás motivada no estás a gusto enada es lógico que no des la tuya, y no pasa nada por eso, segundo te daré mi consejo como vivencia personal, no renueves ese contrato porque estarás atada a esa vida años ya que veo por tu carácter que te será difícil dejar la estabilidad laboral y créeme es muuuyyy difícil salir de la hostelería cuando llevas mucho tiempo, es como si no supieras hacer nada más, eres joven y estás a tiempo. La hostelería tienes que amarla porque es muy sacrificada aunque está cambiando no tienes vida personal cuando todos disfrutan tu trabajas pierdes amistades porque no tienes tiempo para quedar, no puedes conciliar si tienes hijos en la mayoría de los casos etc…en defitiva no vale cualquiera. Escapa

Hola!
En primer lugar, coincido con las demás en que te estas machacando mucho. No es qu quieras dejar un trabajo maravilloso, sino uno en el que te maltratan y no respetan ni lo más mínimo tus derechos.
Te cuento mi experiencia, por si ayuda porque yo también fui camarera durante años a la que su jefe llamaba torpe y lenta.
Pasé por varios bares y al principio era normal que me corrigieran constantemente y, a pesar de que con el tiempo aprendí a ser autónoma (no sin fallos, era amable y atendía con mucho mimo a los clientes), me seguían echando broncas monumentales por cosas básicas como así no se hace el café o así no se pone una caña y también, como no, has tardado mucho en hacer eso.
Esa situación me empezó a deseperar y me hizo creer que no valía para nada, pero como cambiar de trabajo no era fácil, decidí que me iba a documentar sobre cómo se hacen correctamente las cosas de un bar, en internet hay mucha información.
Descubrí, para mi soprrsa, que efectivamente hay determinados protocolos que hay que seguir, pero nada que no estuviera haciendo ya mayormente. Tras esto ya no entendía nada, ni las críticas ni los gritos constantes. Aguanté unos dos años así, hasta que por fin tuve mi oportunidad de cambiar de trabajo. Cuando comunique que me iba mi jefe no dijo nada, pero resulta que no fue capaz de encontrar a nadie más y me llamó varias veces para volver.
Lo que saqué de todo esto es que yo no era una camarera tan horrible como pensaba, sino que simplemente no hacía el trabajo en la forma que quería mi jefe, que no era necesariamente la correcta.
Mucho me temo que también podría ser tu caso, que te estén machacando solo porque no haces el trabajo de la manera en la que se acostumbra en ese bar o como algún compañero «modelo». Eso no significa que tu seas mala camarera, sino que los que te rodean son unos cabrones de libro. Hay muchos tipos de camareros, amables o más serios, más rápidos o más lentos, con más o menos conocimientos, pero nada de eso te hace mal camarero. Lo que importa es que te impliques en el trabajo, quieras hacerlo bien y sobre todo trates bien a los clientes.
Te mando muchísimos abrazos y te deseo suerte para que próximamente puedas encontrar un lugar donde realmente te valoren y te dejen trabajar tranquila.

Yo te entiendo perfectamente. Ahora por desgracia estoy desempleada pero en la última empresa que he estado han sido 11 años en una cocina y aunque es verdad que no teníamos malas condiciones la hostelería es muuuuyyy sacrificada y apenas se tiene vida, durante todos esos años me he perdido muchísimas cosas y ahora intentado que salga trabajo de otra cosa, así que de llorona y caprichosa nada.

Hola amiga, he estado exactamente en la misma situación que tú. Carrera sin salida (Bellas artes) que terminé con 24, y viviendo en este paraíso de país (para los guiris) también tuve que trabajar de camarera. La idea que tenía del trabajo era la típica película romántica Un buen Año, donde cualquiera puede ponerse a servir botellas de vino en la Provenza. Creo que en el imaginario colectivo, como no se requiere nivel de estudios, se considera que es» fácil «. Una p*tisima mi*rda. En el país en el que vivo ahora, se dice que cuando uno se encuentra un buen camarero no hay que dejarlo ir por nada del mundo… Yo era lenta, despistada…un horror vamos. Y me machacaba, como tú: «con la edad que tienes y no eres capaz ni de aguantar de camarera» «necesitas este trabajo» etc etc… El culmen del drama fue cuando finalmente emigré hacia un país más interesado en el arte, trabajé de camarera al principio y me echaron al mes, por qué no aprendía rápido. Normal y comprensible, porque no se me daba bien, pero para mí fue el fin del mundo como primer despido. Soy una persona puntual, motivada, etc… Ahora tengo un trabajo bien pagado, con muchas vacaciones, y veo a esa pobre chica sintiéndose mal del pasado y solo tengo una cosa que decirte: quizás no sabes lo que quieres hacer con tu vida, pero empiezas a saber lo que NO quieres hacer. Y ser camarera no es para todo el mundo. Tienes que ver que no te hagan simpas, contar, hacer equilibrios imposibles, etc. Ten esperanza y busca en otra filial laboral.