Escribo esto mientras suena de fondo “To be loved” de Adele y, al mismo tiempo, resuena en mi mente la angustiante pero tan anhelada idea de ser amada. Para mi son tan claras las razones por las que nunca he parecido merecedora de amor y deseo, en particular de los hombres, mi terapeuta me repite hasta el cansancio que todas esas causas son inválidas, pero en mi historia de vida parecen ser más que evidentes.
Ya se que no encajo en sus estereotipos, que soy una mujer gorda y no del tipo de gorda “aceptable”, soy cero femenina (según su definición heteronormada de feminidad) y me visto sin ningún sentido de la moda, pero, a pesar de que todo eso que me atormenta casi diario, se en el fondo que soy mucho más. Soy brillante, empática, analítica, observadora, leal, respetuosa y la lista podría seguir y seguir… el problema empieza cuando salgo a la calle y me cruzo con las miradas de la gente y claro que mi ansiedad empieza a atormentarme con mil ideas gordofóbicas que seguro la gente está teniendo sobre mí.
Aunque no pienso seguido en lo mucho que anhelo ser amada de manera romántica por alguien (en especial por un hombre, que validaría mi “belleza” ante la visión masculina), es algo que en verdad me lastima y vive como un vacío en mi corazón. Leo sobre amor, veo películas y series sobre amor, incluso puedo ver el amor a mi alrededor, sin embargo, no importa que tan cerca se encuentre, parezco no interesarle. Me han gustado hombres grandiosos con los que llegué a tener una excelente química, pero nunca pasa de ahí, porque ninguno estuvo dispuesto a arrebatar todas esas etiquetas que nos atormentan y oprimen tanto a ellos como a mí; me duele pensar en lo que pudimos haber sido pero simplemente, no fue, aunque nuevamente llega la tan maldecida ansiedad a hacerme sentir ridícula por pensar siquiera en la posibilidad de ser amada, porque claro, soy GORDA y las gordas no podemos ser amadas.
Supongo que solo yo se el gran amor que tengo para dar, tal vez sería más fácil renunciar a esta idea de ser amada que solo me atormenta, pero como dice la gran Jo en Mujercitas: “I feel so lonely”. Quiero ser besada, abrazada, valorada y apreciada como lo he hecho con ellos. ¿Acaso nadie nunca podrá verme como algo más que la chica gorda? Mientras yo deseo con todas mis fuerzas ser amada. Que claro que me da pánico aventarme al amor porque se que nada es para siempre y voy a sufrir un chingo ante mi primer corazón roto pero, nuevamente, como dijo el gran padre de Elio en Call me by your name: “but to feel nothing so as not to feel anything, what a waste…” siento que en el fondo también deseo experimentar este dolor que queda tras una ruptura porque eso solo puede significar una cosa, que fui amada y lo sentí en cada centímetro de mi ser.