Te entiendo perfectamente, si ya se hace difícil de manejar cuando se da entre niños de la misma edad, como me pasó a mí con una de mis hijas que salía llorando muchos días del colegio por los feos que le hacían sus “amiguitas”, no me imagino cómo puede doler que se dé el caso entre tu propia sobrina y tu hija, que además es más pequeña.
En primer lugar, has hecho muy bien defendiendo a tu hija.
En segundo lugar, me harta la gente que se escuda en el “son cosas de niños y no hay que meterse”, porque ese “son cosas de niños” va muy bien cuando tu hijo es el abusón que se dedica a avasallar a los demás, si tu hijo fuera el que viene llorando entonces veríamos si hay que dejarlos solucionar sus problemas solos.
Yo en tu caso lo que habría hecho es coger a tu niña de la mano, llevarla al grupito de primos y delante de todos, explicarle a tu sobrina que ella no es quién para dejar sin jugar a nadie, que hay que respetar a todos aunque sean más pequeños y no sepan jugar igual de bien. Pero en cualquier caso has hecho genial defendiendo a tu hija (4 y 7 años es una diferencia de madurez considerable a esa edad) está claro que tu cuñada es de la misma clase que tu sobrina, porque cualquier persona empática y medio normal, se habría apresurado a decirle a su hija que está mal excluir a cualquier niño del juego menospreciándolo. Y a mí jamás me molestaría que mi hermana o mi cuñada riñeran a uno de mis hijos por algo así, pero supongo que sería porque yo no he visto nada, porque sino no haría falta, me hubiera faltado tiempo para decírselo yo y llevar a su prima de vuelta al juego.