Es la primera vez que voy a escribir aquí, y lo hago básicamente porque no tengo con quién desahogar.
Hace escasas horas le preguntaba a mi pareja, con la que convivo, qué plan había para hoy. Hace un día estupendo y podríamos salir a dar un paseo, tomar algo, o hacer lo que sea, pasar tiempo juntos aprovechando el sol. Su respuesta fue «Me estoy haciendo una sopa». Vale, ¿y? Cuando termines de engullir tu sopa podemos hacer algo. «¿Quieres hacer algo?», me dijo, «Lava esa manta, y aprovechando el sol la tiendes. Si quieres hacer cosas, te doy yo cosas para hacer». No sería tan terrible si no fuera porque, en primer lugar, que me hable de labores de la casa la persona cuya única obligación es fregar los platos y es capaz de tenerlos días en el fregadero acumulando mierda, para después ponerse a fregarlos y dejar la mitad ahí porque «me aburrí de fregar», tiene TELA.
Segundo, porque no es la primera, ni segunda ni ojalá tercera vez que le propongo hacer algo y siempre tiene otra cosa mejor que hacer (ya sea hacerse una puta sopa o tirarse en el sofá a ver mierda en Youtube), pero eso sí, a la mínima que recibe una llamada de algún amigo para salir, ahí deja la sopa a medio hacer (jurao) para marcharse. Y el plan es siempre el mismo: beber. Beber en casa del colega en cuestión, en un bar, en un concierto, en la calle como si tuviéramos quince putos años…
Y me agota. Mentalmente me agota, porque hace unos meses me diagnosticaron depresión, pero ya era algo que arrastraba de antes, y sus comentarios no se hacían de rogar al respecto de mi estado de ánimo: que estaba en casa como una seta, que no hacía cosas, que NO LE PROPONÍA HACER COSAS. ¿Perdona? Cada vez que lo hago me dices que ahora no, y al rato, si te llaman para salir, entonces sí.
Se lo he dicho, y su respuesta ha sido, en tono burlón, «¿Estás celosa de mis amigos?», para al rato añadir «Al menos mis amigos me caen bien, no como los tuyos», que a cuento de qué. Porque esa es otra, le sobran calificativos negativos para todos y cada uno de mis amigos sin excepción (aunque no haya hablado nunca con ninguno de ellos), pero como a mí se me ocurra sacarle punta a alguno de los suyos ya puedo echar cuerpo a tierra porque vienen misiles. Pero eso es otro tema.
La cuestión es que ya no sé qué hacer, necesito hacer cosas, salir (y lo hago, quedo con mis amigos, o con mi madre, procuro mantenerme ocupada), cualquier cosa que me distraiga para no hundirme más, para no ser «una seta» como dice él; ¡pero es que la seta es él! Conmigo, eso sí, no con sus amigos, que es lo que me jode, y si me jode y exteriorizo mi jodería, se enfada, because of reasons. Debe de ser que nos gustan las mujeres con carácter hasta que nos llevan la contraria (y ahora mismo sacar carácter me cuesta la vida, pero si no lucho yo por mi bienestar mental no lo va a hacer nadie).
Y sí, quiero hacer cosas con él porque es mi pareja, no me parece tan extravagante lo que pido.