Hola. Escribo en este apartado del foro porque no encuentro otro más acorde.
Estoy algo preocupada. Mi ex suegra siempre me transmitió muy malas vibraciones. Es una persona que nunca sonríe y que está dispuesta a hacer el mal. Mientras duró la relación con mi ex, cada vez que la veía me transmitía muy mal rollo, me generaba hasta ansiedad. Vivíamos en el mismo edificio y llegué a evitar encontrarme con ella.
Nunca fui de su agrado. Disimulaba delante de sus hijos, pero hizo todo lo posible para que mi relación se rompiera. Lo consiguió. De hecho, después de la ruptura, quedé con mi ex en alguna ocasión y llorando me comentó que me había echado mucho de menos y que era consciente de que tenía que irse de esa casa. Me dio la sensación de que no había sido del todo su decisión, de que había sido algo «impuesto», sobre todo por la manera en que me estuvo evitando mucho tiempo, llegando incluso al victimismo por su parte (muy raro…).
Bueno, esa señora hizo cosas muy absurdas. Entre ellas, llamar a mi familia para decirles que yo les había enviado a una funeraria a la casa…(es mentira, obviamente). Además, en una conversación telefónica llegó a soltarme que estaba muy contenta porque tenía a su hija de vuelta con ella. Lo grave es que mi ex llegó a contarme que su madre la manipulaba cuando era más joven… y que llegó a llevarla al psicólogo cuando se enteró de que era lesbiana. Es una familia bastante oscura. Me amenazaron con hundirme y joderme el futuro (descubrí muchas ilegalidades) y ahora mismo, parece lo están consiguiendo.
¿Creéis en la brujería? Mi ex me comentó que una amiga de la madre, que la visitaba asiduamente, hacía brujería. Vale, escribiendo esto me siento un poco ridícula, pero es que me han pasado cosas que han llegado a asustarme.
Hace unos meses, siguiendo los consejos de una amiga, intenté «purificar» mi casa para apaciguar las aguas. Resultado: incendio en mi casa. Inexplicable, porque la vela estaba en un lugar en la que no había nada que pudiera quemarse y no había corrientes de aire. Se quemó una mesa (por debajo) que había sido de mi ex…
He perdido el trabajo (me lo quitaron ellas), parece que no levanto cabeza y no dejo de tener pesadillas con ellas.
Y ya la gota que colma el vaso es que ayer, caminando por un paseo, cada vez que pasaba por una farola se apagaba… Muy mal rollo. No me gusta nada la situación. Esto se lo he comentado a algunas amigas que no creen en lo paranormal y coinciden en su respuesta: no le ven explicación, pero no les gusta nada.
¿Creéis que el odio de una persona puede generar malas vibraciones? No sé qué pensar. Quizás todo es un cúmulo de casualidades, pero ya tengo para rodar una película de terror.