A ver, no sé si esto te servirá. Mi madre eran 5 hermanos, y dos de ellos (un chico y una chica) se lo habían montado muy bien en la vida (básicamente, supieron buscarse familia política de pasta, mientras que mi madre se casó con un obrero pobre). Así que yo he crecido en el seno de una familia muy humilde, en un piso 4° sin ascensor, compartiendo habitación con mis dos hermanas mayores, y yendo a veces a casa de mis primos, que vivían en mansiones con vidas de lujo (todos los juguetes y consolas, piscina en casa, coches, todo tipo de dulces, etc…) Y para mí no fue ningún drama. Mi madre me explicó desde pequeña que en esta vida hay gente que tiene dinero y otra que debe ganarselo, así que lo entendí y nunca tuve envidia. A día de hoy si que tengo un primo que pegó un buen braguetazo, pero al resto les ha tocado currar, como a mis hermanas y a mí. Evidentemente han tenido mas facilidades, pero mirándolo en global creo que ninguno de ellos ha»llegado más lejos» que yo (todos tenemos estudios superiores, trabajos más o menos estables y «bien» remunerados, vivienda en propiedad o alquiler, etc…)
Así que no te agobies, déjalos jugar, deja que vayan a tu casa también y, si tu hijo pide mucho, explícale que tú no puedes dárselo pero que sus primos lo comparten con él. Evidentemente tendrá sus rabietas, como todos los críos, pero al final lo entenderá.