Yo me operé hace 4 años y medio y aunque he tenido un problema en la rodilla el último año y he cogido algo de peso otra vez, que estoy tratando de perder, lo cierto es que yo pesaba 135 el día de la cirugía, y mi peso más bajo ha sido 87.
La verdad es que aunque hay cosas que me sientan peor o mejor, como o intento comer de todo (la fruta es que no la soporto de ninguna forma), pero si que cuando no hago deporte, veo que me estanco, y me da bastante rabia. Siempre he tenido problemas de hormonas, y aunque ahora están «en regla», sigo teniendo Síndrome de ovario poliquístico y me ha costado siempre más perder que a otras personas.
Lo que si te digo es que mis médicos si que fueron un poco cafres… Yo pesaba 165 cuando me llamaron de la lista de espera, y me pusieron directamente a 1 batido al día, y 2 comidas, luego 2 batidos y 1 comida, y ya el último mes, los 3 batidos al día.
Fue un cambio muy drástico, perdí casi 30kgs, así. El batido se supone tiene todos los neutrientes y blablabla, pero ya te digo yo que el cuerpo lo nota. Quizá sean los nutrientes para un peso de imc normal, pero no cuando pesas más de 130.
La cosa es que yo me encontraba muy floja, pero después de la operación, fue horrible para mí. Mi habitación del hospital tenía la calefacción rota (estaba a 15grados), eso hizo que al salir de quirófano, falta de calorías, y frío, mi cuerpo entrase un poco en «letargo» y no expulsaba la anestesia de ninguna forma, con lo que apenas despertaba unos minutos y volvía a caer dormida. Tuvieron que ponerme suero rápido para poder expulsarlo, porque sólo podía tomar infusiones, que ni me apetecían, y además con la temperatura de la habitación, se enfriaban en seguida.
Al segundo día, se supone debía levantarme. Me encontraba muy mal, pero me levanté al sillón. La cama se estropeó, y pasé más de 12h sentada porque nadie lograba arreglar la cama, y como sólo había 2 aptas para bariátricos en el hospital, y la otra estaba ocupada, hasta que no lograron solucionarlo, no podía acostarme.
Intentaban hacerme análisis y ni siquiera lograban coger alguna vena, porque estaban contraídas del frío. Pero los médicos seguían con que me tenía que levantar.
Hay que sumar, que en el último mes, mi regla había decidido hacer acto de presencia constante, y llevaba un mes sangrando, y para más inri, me empezaron a inyectar heparina para que no tuviera trombos. Al final estuve ingresada un día más de lo previsto.
Llegué a casa, y la cosa no mejoró, yo me sentía muy débil, tanto que apenas aguantaba unos segundos de pie… Me mareaba constantemente, simplemente de camino al baño, y además empecé a desangrarme con la regla y a soltar coágulos de sangre que me hicieron acabar en urgencias, y tomando unas pastillas para cortar la hemorragia.
2 semanas después de la operación, por fin empecé a tomar algo de comida, y poco a poco se normalizó. Aunque yo a los 2 meses, a penas podía salir a dar unos pasos por mi barrio, porque me podía caer mareada al suelo, y meses después aún tenía mareos constantes, llegando a caerme en la ducha y perder el conocimiento, o estar agachada, levantarme y caerme redonda al suelo.
Fue un proceso muy duro porque aparte de que tu cuerpo no asimila todo lo que le está ocurriendo, y trata de retener la grasa todo lo posible, tampoco eres consciente de que comes muy poco, ni de que la ropa te va quedando grande por semanas. La piel cuelga de sitios donde antes no lo hacía, y al final es un cambio muy grande en general.
Yo ahora había cogido de nuevo la rutina deportiva para intentar seguir perdiendo, y después de más de 3 años, me llamaron para hacerme la abdominoplastia, así que ahora tengo otra vez parado el ritmo y necesito volver a sentirme activa, porque siento que he perdido masa muscular de no poder hacer esfuerzos ni coger peso. Con esta última no estoy muy contenta, porque considero que para una operación de tal envergadura, deberían haberla hecho en condiciones, y de arriba no me han tocado nada (tengo una barriga como de 4-5 meses, que ya dudo que sea hinchazón), hay flacidez, y además el ombligo no está centrado del todo, pero esa es otra historia, y si alguien le interesa mi experiencia, que me diga y la cuento!
De todos modos, y a pesar de que como ves, los astros se alinearon para darme un postoperatorio horrible, te aconsejo que te operes. Yo no tenía problemas añadidos de colesterol, hipertensión, hígado graso, diabetes, y demás, pero si ausencia de regla por SOP (llegué a estar más de 2 años sin regla, aunque con síntomas de estar ovulando todo el tiempo), y muchos dolores articulares. Y aunque la regla se ha establecido bastante (con ciertos desajustes), los dolores articulares han mejorado relativamente, porque como dice mi endocrino «os véis más ágiles, y queréis hacer más cosas, y las rodillas no están acostumbradas a esa actividad, y al final terminan dando problemas»
Al final te gustas más, no por perder peso, o no porque yo antes no me arreglase, lo hacía, siempre he sido muy de ir «mona» pero no encontraba ropa (y entonces no había tanta oferta por internet para poder vestir como una quería), tenía que ceñirme a ropa que hacía mi madre o de «señora» y eso al final, te echa más años encima. Y luego te sientes mucho mejor porque puedes ir a los sitios andando, o hacer ejercicios que antes no podías! Al final se gana mucho en salud! Seguro que todo va de maravilla! ;)