Hola guapa
Sí, claro, yo creo que a más de una nos ha pasado/nos pasa. En mi caso,al igual que tú me veo obligada a ir a comer un par de veces a la semana o incluso más,tampoco me llevo bien. De hecho yo creo que es mutuo, porque las caras de mi suegra hacia mi alguna veces…
El caso es que lo hemos hablado mi pareja y yo alguna vez, intenta que me sienta más cómoda (sin resultado)…y yo no quiero hacerle daño a él porque sé que disfruta esos días y le encanta estar en familia. Yo creo que con el tiempo nos adaptaremos, habrá otros momentos que compensen, descansos, etc y así y teniendo en cuenta que estás con tu pareja y no con ellos, que le quieres y te gusta verle feliz, se sobrelleva.
Un beso!

Admitamoslo, las suegras molonas no existen, son los padres.
El problema es que tendremos que soportar a una familia política hasta que la muerte nos separe en el mejor de los casos, por lo que es mejor sonreír y asentir a todos los comentarios chorra como yo más, o hijo tienes frío? Etc… Cuando se salgan del tiesto, háblalo con tu pareja, y que sea él el que comente el problema por ser la familia directa, sino.. Parecerás la borde….y suegra enemiga al canto.
Háblalo con el, seguro que lo entiende y/o podéis llegar a un acuerdo. Aunque no sea tu madre ni tu familia directa, debemos un respeto a las suegras… Y que conste que me lo digo en voz alta para ver si me oigo jajaja

La verdad es que la convivencia o supervivencia con la familia política es un problema generalizado.
Para empezar los maridos tienen a las madres y hermanas como seres perfectos y están ciegos en cuanto al comportamiento que tienen con nosotras.
Yo desde que tuvimos casa propia los invite de vez en cuando a cenar o comer, me ofrecí con los sobrinos pq tenia disponibilidad, traía siempre algo cuando nos invitaban a casa de los suegros, pq en 12 años mi cuñada nos invitó 2 veces, nunca nos han dejado tener en sus hijos en casa, mis hijos nunca han sido invitados a los cumpleaños de los primos, pero nosotros siempre los tenemos que invitar…
A todo eso siempre desprecios a lo que hago, si tengo thermomix criticada, si mis hijos no comen bollería criticados, si cocino criticada… pero la malvista soy yo y mi marido está cegado. Un día en una barbacoa yo lleve comida para mis hijos, pero resultó que mi suegra llevó para los otros nietos pero no para nuestros hijos…
Hay días en que pienso que si un día me separo será por su familia pq nada provoca más discusiones que la intromisión de su familia en nuestras vidas.