Hola chicas! Soy fiel seguidora del foro y de todas vuestras historias y cada día la de mas personas. Justo ayer leí el post de una chica que contaba que se iba a casar con un chico que conoció por Tinder y gracias a esta cuarentena me he animado a escribir por aquí por primera vez y así contaros mi historia para hacer ver al mundo, como hizo ella, que Tinder no es un lugar tan oscuro como suele parecer.

Mi historia comienza como muchas otras: con el fin de mi relación anterior, la despedida más turbia que alguien pueda imaginar con la persona con la que había pasado 5 años de mi vida (desde los 16 hasta los 21) y mi primer gran amor. Estaba muy hundida y solo quería divertirme un poco y conocer gente así que ahí fui yo a descargarme la App tan conocida, odiada por muchos y amada por pocos: Tinder.

La primera impresión, no lo negaré, fue que era algo divertido pues tenías acceso a muchas personas y por primera vez en mi vida (aunque con 21 años tampoco lo vi una locura jajaja) descubrí lo que era un match. Empecé a hablar con varios chicos, con muchos chicos, pero la realidad es que en cuestión de 4 días fui seleccionando y acabé hablando por WhatsApp con 3 chicos con los que creía que podría tener más afinidad.

Como era nueva en este mundo, me sentía un poco rara hablando para quedar con 3 personas diferentes, así que finalmente, y un poco al azar acabé quedando solo con uno, ¡Y BENDITO AZAR!

Quedamos el primer día y para mi sorpresa no estaba nada nerviosa; me sentía como si hubiera hecho eso mismo cien veces más y no como si fuera la primera vez en mi vida que quedaba con un desconocido. La conversación fluía sola, me reí muchísimo, nos fuimos de tapas y como yo estaba de exámenes la cita terminó a las 2 de la mañana con un buen morreo en el portal del piso de mi amiga donde me quedaba a dormir.

Esto sucedió a primeros de junio, y se acompañó de un gran verano, conociendo poco a poco a alguien muy especial y que cada día me aportaba más y más. Ahora estamos a 18 de marzo y seguimos juntos, y creo que jamás podría haber imaginado tener una relación tan sana con alguien, viéndolo en tan poco tiempo como un gran amigo y a la vez mi pareja.

Yo misma me dije que podía ser pronto para iniciar una nueva relación cuando la otra estaba tan cercana (no tóxica, pero sí con un final horrible) pero mis amigas me convencieron que no podía perder la oportunidad de conocer a alguien con quien tan agusto me encontraba en ese momento y me hacía sentir tan bien.

Ahora llevamos 9 meses y estamos pasando juntos la cuarentena en casa de mis padres (yo soy estudiante y vivo con ellos aún) pues él sigue trabajando al ser de servicios esenciales y está solo en la ciudad donde ambos vivimos.

Esta es mi historia chicas. Yo solo me metí en Tinder para conocer gente y la verdad sea dicha, buscarme algún folla-amigo o similar, sin embargo, el destino es caprichoso y cuando menos te lo espera, la vida te sorprende. ¡¡Mucho ánimo a todas y no desesperéis si el fin es encontrar pareja, porque se puede y estoy convencida que al igual que hay chicas magníficas en la App, también hay chicos que valen muchísimo la pena!! ANIMO (Y TAMBIÉN CON LA CUARENTENA!) #YoMeQuedoEnCasa