No sé si es más patético que mi madre a estas alturas de mi vida, intente buscarme pareja, o que realmente se crea que soy tonta de remate y no me doy cuenta.
Desde que me divorcié a los 38 años, no para de presentarme algún soltero. Al final ya me cabré, estallé en cólera y le dije que se estuviera quietecita que yo ya era mayor para decidir si querías tener pareja o no y desde luego decidirla yo sola.
Eso les sentó fatal, pero después de una semanas haciendo berrinches, parecía haber entrado en razón y prometió no volver a hacerlo.
Ahora ha vuelto a las andadas, pero de forma más sutil, cómo hacerse la encontradiza conmigo, saliendo del gimnasio, cuando justamente acaba de encontrarse al hijo de una amiga que hacía tiempo que no veía. Por supuesto, me lo presenta entusiasmada y me ponen una excusa cualquiera para desaparecer. Esa es una de muchas, que ya he perdido la cuenta de todas las que ha liado.
Realmente cree que así conseguirá algo? De hecho solo por el hecho de que lo haya provocado, ella ya no le daría ninguna oportunidad y a lo mejor el chico merece la pena.