¿Cómo que no pasa en España? Me da que no has visto una nómina en tu vida.
En España de tu salario base y complementos se te tiene que reducir el pago a la seguridad social y luego el pago del IRPF. Los porcentajes exactos los puedes ver en la ley de presupuestos generales del estado de cada año y en la ley del IRPF del BOE y de cada comunidad autónoma, aunque te voy a poner unos porcentajes aproximados y solo te voy a poner los que le corresponden al trabajador, porque los empresarios por cada trabajador debería pagar bastante más.
Empezamos por seguridad social, en el régimen general de la seguridad social (dependerá del tipo de actividad que hagas quedar incluido en ese o en alguno de los régimen especiales) se paga 4’70% de contingencias comumes, lo que te corresponda de accidente laboral que suele estar en el 1’55% y el pago por formación profesional 0’1%. Además, si hacer horas extraordinarias, la cotización a cargo del trabajador será del 2%.
Por otro lado, tienes el pago del IRPF. Normalmente se paga mediante las retenciones que te hace todos los meses la empresa de tu sueldo que dependerá de cuánto cobres. En el cálculo del IRPF de tiene que sumar todos los rendimientos de la persona, no sólo los derivados del trabajo, y se les deducirán ciertos aspectos como el mínimo personal o familiar y otras deducciones. De eso sacas dos cuotas a una le aplicas a escala estatal y a la otra la autonómica que dependerá de la Comunidad Autónoma donde estés (siendo la de Madrid una de las más bajas, que por eso dices que Madrid es el «paraíso fiscal» de España).
La escala de las cuotas la tienes en la ley del IRPF y en las leyes de cada comunidad y dependerán de la cantidad que te salga de cuota, pero por ejemplo para una cuota (recordemos que no solo el sueldo, sino todo tipo de ingresos) de 20.200€ (entre 12, 1.683,33€), le tienes que quitar el 15% de la escala estatal y lo que le corresponda de la comunidad autónoma (por ejemplo, en Madrid serían 12’80%, en Barcelona, Valencia, Andalucía sería del 15%). Lo que daría un 27’80% de IRPF, en lo más bajo, a lo que habría que sumar la seguridad social.
Siendo España uno de los países con los impuestos más caros. Por eso se queja la gente.