¡Hola! En primer lugar, siento la situación, que un momento tan bonito se vea entristecido por la pérdida de tu suegro… En segundo lugar, tal y como yo lo veo, el niño ya tiene su nombre desde hace meses, ha sido una decisión consensuada. Ahora, de manera abrupta y fruto del dolor, cambiar el nombre (sobre todo si tú no quieres) no me parece justo en absoluto. Al fin y al cabo, para ti tu bebé ya es «Martin», es su identidad, y cambiarlo por un nombre que ni siquiera te agrada no es lógico. Con mucho tacto, puedes explicarle a tu chico que no es un feo o un desprecio hacia su padre, pero que tampoco sería justo para el bebé tomar esa decisión desde el dolor y la visceralidad, ya que no solo es que el nombre sea bonito o no, es que, además, lo vais a asociar siempre a que se puso por la muerte del abuelo, no porque os gustase. Su padre es su padre, y su hijo es su hijo, la idea de un homenaje está bien, pero no es imprescindible. Un abrazo, y buen parto!