Mi novio y yo nos hemos llevado juntos unos 9 años. Siempre hemos sido una pareja que se ha querido mucho y bien.

Hace aproximadamente un año yo empecé a sentir que iba perdiendo la chispa por él (lo quería, pero no sentía que me desviviera por él como antes). Al principio no le di importancia a este estado, pero desde enero la cosa se fue haciendo más evidente y a finales de febrero tuvo lugar nuestra primera gran crisis. En ese momento decidimos darnos un tiempo y alejarnos para descubrir si de verdad queríamos seguir juntos por amor o si seguiríamos solo por costumbre. Así nos hemos llevado un mes y medio, que ha sido muy muy duro, pero que a la vez ha supuesto un gran crecimiento personal para mi (y creo que para él también de alguna forma).
Empezamos con apenas 18 años y hemos crecido juntos etapas y transiciones vitales importantes, y creo que ahora nos tocaba pasar este proceso solos para acabar consolidandonos como personas adultas.
Tras este tiempo ambos hemos descubierto que podemos vivir el uno sin el otro, pero que no queremos hacerlo, porque nos queremos (no se trata de miedo a estar solo, sino al deseo de estar juntos).
El problema viene cuando se produce el reencuentro físico. No fue mal, pero quizás mis expectativas eran demasiado irreales. En mi mente pensaba que al vernos todo volvería a ser como antes y que sería como si nada hubiera pasado (algo imposible y muy poco sano en caso de que así fuera).
En este momento me siento como si siempre hubiéramos caminado juntos por el mismo camino y en un momento concreto, cuando tocó elegir entre seguir por ese camino o escoger cada uno el suyo, elegimos cada uno el nuestro. Ahora nos hemos dado cuenta de que queremos volver a compartir camino, un camino que ha de ser distinto. Y en ese punto estamos, los dos yendo por un nuevo camino, juntos, pero sin ir cogidos de la mano todavía.
Mi sensación ante todo esto es de desconcierto e incluso de miedo, por lo desconocido y por el temor de volver a sufrir.

Es la primera que vivo una crisis, si alguna ha pasado por algo parecido, agradecería sus palabras.
Un abrazo infinito.