Hoola, por aquí vuelvo en busca de cruda realidad…ya he escrito anteriormente con mis idas y venidas amorosas así que ahora tirada en la cama pensando en él me animo a contároslo.
Fue un día de septiembre,después de la playa nos fuimos a un miniconcierto al aire libre (dadas las circunstancias) y allí lo vi a él, sentado con los colegas tomando mil9, yo hacía lo mismo con los míos. No nos conocíamos de nada, quedé prendada mirándolo, lo que hacía, como iba vestido…en fin lo que pasa cuando alguien te llama mucho la atención, y mi gente lo notó, me animaron a escribirle porque casualmente una de mis amigas había ido al colegio con él, y así lo hice esa misma noche…La frase que le escribí dio mucho que hablar…»me has dejado loca» y a partir de eso comenzamos a hablar prácticamente a todas horas, mandarnos fotos, se va de viaje me cuenta cada detalle, pendiente de mis movidas…
Decidimos quedar en cuanto regresó, creo que ambos somos muy impulsivos y si nos apetece hacer algo lo hacemos al momento sin dudar,nos acostamos y las conversaciones se van enfriando. No entiendo la razón, vamos hablando una vez por semana o así, unas veces él otras yo, sigo con mi vida sin darle muchas vueltas (ya que me conozco el tema y prefiero no pensarlo). Volvemos a quedar un par de veces más, en la última se despidió diciéndome que le había encantado estar conmigo y lo guapa que iba…Ante esto, me sentí vacilada ya que no me gusta que me digan cosas bonitas sabiendo que al día siguiente no vamos a hablar y al otro tampoco. Quiero decir, que de nada me sirven las palabras sin hechos. Cansada de la situación, de ver que pasa de mí, le digo que me bloqueé y no me vacile más, así lo hace. Pasan días sin saber uno del otro…
Es viernes, estoy en el super dónde sabe que curro y al que nunca antes había ido, rodeada de nata que es lo que estaba reponiendo en ese momento, y una voz masculina me habla por detrás…»oye perdona, dónde están las patatas?» Os podéis imaginar quién era… Creo que nunca he vivido una situación así antes, no me salían las palabras y escasamente le dije si, están por allí al fondo…Se notaba su risa picarona por debajo de la mascarilla pero aún así no hablamos nada más y yo me fui muy pensativa para casa… será que vino a verme? A vacilarme más? Solo vino a por patatas? No se, no entiendo nada y sigo bloqueada en was, no en las demás redes…asi que nada, de lo único que valió verlo fue ponerme muy cachonda en el trabajo y llena de dudas…
Espero que os anime el día mi triste historia, un besazo.