Hola,
Soy una mujer de 58 años, me considero de buen ver y con mucha energia sexual.
Desde que me divorcie, he salido con hombres mas o menos de mi edad, sin llegar a tener grandes experiencias, mas que salir a cenar, a bailar y esporadicamente algun encuentro sexual.
Pero un dia, en una discoteca empezo a revolotear a mi alrededor un chico jovencito, sobre unos 22 -23 años, y sin extenderme mas, acabamos teniendo sexo. Pero mucho. Me hizo sentir cosas que creia que nunca llegaria a sentir, era inagotable. Yo estaba muy feliz porque no tenia ningun tipo de responsabilidad ni vinculo con él, venia un dia o dos a mi casa y me hacia tocar el cielo durante 1 o 2 horas.
Pero un dia vino él con un amigo, y eso ya fue algo indescriptible, al dia siguiente casi no podia con mi alma. Y eso ya se convirtió en algo habitual, venia con diferentes amigos, y yo estaba deseando conocer nuevos amigos suyos. Me hacia sentir muy mujer y muy segura de mi misma, tenia mi autoestima por las nubes, sintiendome capaz de conquistar a quien quisiera y cuando quisiera.
Durante la pandemia todo acabo y yo estaba como loca, masturbandome a diario, me converti en una yonqui del sexo. Ahora lo echo muchisimo de menos, necesito esa adrenalina de ofrecerme a chicos desconocidos y entregarme a todo lo que me quieran hacer, sentirme deseada y ocupada en toda mi capacidad sexual. Se que esta mal, pero no puedo evitar sentirme asi, se que no es bueno y que ya soy mayor, pero despues de haberlo probado no puedo dejar de pensar en volver a experimentar esas sensaciones… que consejos me podeis dar, que puedo hacer…?