Uff no sé ni cómo empezar porque estoy temblando mientras escribo esto. Tengo 20 años, sufro de depresión y ansiedad diagnósticas y tratadas desde hace muchísimos años (en realidad no me di cuenta del problema hasta hace apenas 2 aunque las tengo desde cría). No quiero caer en el error de echarle la culpa de una enfermedad mental a mi familia, pero mis padres han tenido muchísimo que ver en ella porque no han sabido apoyarme ni llevarla en ningún momento, de hecho incluso todo lo contrario. Me explico: ellos no saben que tengo depresión y ansiedad porque yo me di cuenta del problema cuando me fui de casa a estudiar fuera. Pero claro, yo he tenido ansiedad desde cría y se manifestaba en síntomas: irritabilidad, aislamiento, llanto, etc
…Pues mis padres en vez de escucharme o intentar que recibiera ayuda se dedicaron durante toda mi infancia a decirme que era una amargada, que era una envidiosa…y básicamente destruyendo me la poca autoestima que tenía. A raíz de eso mi relación con mis padres no ha sido muy buena, por no decir pésima desde los 14-15 años. Apenas nos hablamos aún viviendo bajo el mismo techo. El confinamiento lo pasé con ellos y tuvimos una bronca descomunal y básicamente toda la tensión que había acumulada desde hacía muchos años explotó en esos meses: me ignoraban, no me avisaban a las comidas familiares, me empujaban, me abofeteaban sin motivo, me insultaban cada dos por tres.
Yo tampoco me quedó atrás, desde abril (la bronca) hasta agosto donde arreglamos las cosas no les diriji la palabra a ninguno, me dediqué a ignorarlos durante meses. Ni que decir tiene que la situación me afectó muchísimo, tuve que aumentar la dosis de mi medicación al triple porque me daban ataques de ansiedad fuertisimos durante horas, no podía levantarme del suelo, me desmayaba, vomitaba, etc. Al final en agosto medio arreglamos las cosas (mis padres me siguen hablando de buenas pero yo cordial y ya está porque no les voy a perdonar en la vida los meses horribles que me han hecho pasar) y yo en nada que pude (principios de septiembre) me fui a mi piso de estudiante en otra ciudad. Llevo ahí desde entonces y tiemblo de miedo cada vez que pienso que tengo que volver a mi casa en nada. Porque nos vamos. Confinar, cancelar las clases y no tiene sentido que pague el piso. Porque voy a tener que volver a una casa donde estoy tensisima siempre. Y es que prefiero morir a tener que enfrentarme a meses tan horribles como los de abril a agosto. Os lo prometo que no podéis ni imaginar lo mal que lo pase, sigo teniendo pesadillas con ello, cada vez que me acuerdo de cualquier cosa traumática que pasara en esos meses lloro de la ansiedad. Y no sé qué hacer, es que siento que voy a tener que volverme y no lo voy a soportaar