WatsomApp es un robot que identifica y previene el acoso escolar o bullying, ya sea físico o psicológico. Aún hoy en día se siguen registrando casos de acoso, y en el peor de los finales esto puede acabar en suicidio. Por eso, muchas son las ideas que surgen para ponerle fin. Para enfrentar el desafío, WatsomApp se asoció con IBM para crear una solución de inteligencia artificial (IA) que ayuda a los educadores a identificar y prevenir de manera proactiva el acoso en el aula.

Estos dos robots nacen de la empresa española Kio Ai, y ya se han puesto a funcionar en algunos centros del país. Además, cuentan con propio nombre: Snow, el blanco y grande de 1 metro de alto que se va desplazando con su pantallita interactiva y habla con los alumnos para ganarse su confianza y QBO, el pequeñito.

Ambos robots fueron creados por psicólogos, pedagogos e informáticos y pueden mantener conversaciones con niños y adolescentes de entre 8 y 16 años. Así, jugando y hablando con ellos identifican tanto casos de bullying como de cyberbullying (acoso y ciberacoso). Snow y QBO fueron probados por 4 mil escolares y en varios colegios redujo hasta un 40% el acoso. Para poder llevarlo al colegio donde estudias, donde trabajas o donde estás escolarizados tus hijos, es tan fácil como darse de alta y hablarlo con los profesores. Estos robots registrarán los datos de sus alumnos y los tutores podrán acceder a ellos para ver su recorrido y avance. A día de hoy están en 6 colegios españoles de Madrid, Asturias y el País Vasco. El programa antiacoso combina juegos online y conversaciones con el robot, para poder ganarse su confianza, lo que hace que sea una herramienta para detectar tanto al acosado como al acosador y que las escuelas se den cuenta de esto.

Uno de los principales problemas del bullying es que la víctima se calla por vergüenza, por miedo a lo que puedan pensar, por sentirse culpables, no darle la suficiente importancia… Siempre se ha dicho que no nos debemos de callar, tanto si somos la víctima como si lo vemos, ya que si no seremos igual de culpables. Esta herramienta al no hacer juicios de valores ni criticar, empatiza con el alumno, y lo ayuda para poder hablarlo con los padres y tutores.

Tras conocer a todos los alumnos, pasan un informe a los enseñantes del centro, y tal es la precisión que poseen que hasta estudia la voz de los alumnos y el tono en el que le hablan. Es una detección rápida para actuar de inmediato que debería de utilizarse en todos los colegios. Eso sí, hay que tener en cuenta que esto también depende de nosotros y que aún hay mucho por hacer. Otra vez más: Tolerancia 0.

 

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