En primer lugar, si has entrado en este post es porque algo sospechas. No estás segura o no quieres admitirlo, pero tu etapa de señora se acerca.

Puede que no hayas perdido las ganas de salir de fiesta, de salir con chicos guapos o de ponerte remona siguiendo las últimas tendencias (o las de hace dos décadas, eso es cosa tuya). El tema es que puede que sientas que hay algo en tu interior cambiando, una gran fuerza que te lleva a recolectar todos los tuppers de casa y a poner la oreja cuando la vecina de arriba se enerva con la Paqui.

Yo, por mi parte, ya he asumido mi naturaleza de señora. Por eso me he tomado la libertad de recoger una serie de indicios que señalan que tu momento no tardará mucho en llegar:

  • TE ENCANTAN LOS CATÁLOGOS CON LAS OFERTAS DEL LIDL

Quien dice Lidl, dice Aldi, Ikea o Carrefour. Pero, reconoce que te emocionas cada vez que ves que ha llegado el catálogo nuevo al supermercado. Y, admítelo, siempre lo coges como quien no quiere la cosa, pero, en el fondo, llevas todo el hype encima por descubrir qué nuevas sorpresas habrá dentro.

  • SÁBADO NOCHE CON TU COPITA DE VINO Y NETFLIX

Sí, te sigue encantando salir de fiesta y darlo todo en la pista de baile, pero llega ese momento en el que tus amigas están desfasadas en el clímax de la noche y tú sólo piensas en lo bien que estarías en casa con tus series y tu vinito. CONFIESA.

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  • TE MOLESTAN LOS JÓVENES

Maticemos. No es que odies a todo ser viviente de menos de 25 años de existencia, solo es que no comprendes su mundo porque en cuanto viste la carita del perrito de Snapchat decidiste que eso no era para ti, pero Hakuna Matata, mientras te dejen vivir, todo correcto.

Lo que no comprendes es porqué se comunican a gritos. SIEMPRE. PARA TODO. PARA HABLAR DE MALUMA, DEL PROFE DE MATES Y HASTA DEL PRECIO DEL PAN. ¿POR QUÉ?

  • A QUIÉN MADRUGA, DIOS LE AYUDA

Primerito, seguro que eres fan de los refranes. Pero, por otro lado, ¿y lo bien que se está ahora, en otoño, enrollada en el edredón como un bollito de canela para entregarte a los brazos de Morfeo? Si, encima, haces eso antes de las once de la noche y puedes madrugar al día siguiente para aprovechar el día, ¡mejor que mejor! dd

  • LA REBEQUITA DE POR SI HACE FRESCO

Nada más que añadir. O la llevas tú o se lo sueltas a tu compañera de piso cuando sale por la puerta. Eso es así.

  • EL GOSSIPEO ES LA SALSA DE TU VIDA

Gran parte de la esencia de ser una señora consiste en ser una buena cotilla. Cualquier cosa te vale, desde la vecina discutiendo con su hijo por las llaves del coche, hasta las injusticias que se han cometido en la selección de finalistas para representar a Moldavia en Eurovisión. Hasta puede que llegues al punto de que cuando sales de fiesta tienes a una amiga encargada de ponerte al día sobre todos los gossipeos de la noche, no vayan a quedarse sin comentar.

  • ERES LA VECINA QUEJICA

Esta es mi favorita y con la que más me identifico. Si alguna vez has cogido una escoba y golpeado el suelo o el techo porque los vecinos se estaban pasando con su rave del martes por la noche me entenderás. Otras versiones alternativas son chistar por el balcón o echar una mirada de reproche la mañana siguiente cuando el elemento ruidoso vuelve a la cueva para dormir la mona y tú te vas al curro.  MLFEA66R1K9bT4XdXZNd_Grandma Shooting

CLARA RICO.