¡Qué cíclica es la vida universitaria! Cada seis meses vuelvo a empezar y las fases vienen a ser tal que así:

1.- Emocionada comprándote nuevo material para empezar el semestre

2.– Vuelves a clases, sin una sola campana, sentándote erguida y sonriente. «Juro que lo llevaré todo al día»

3.- Buuuenooo, todos sabemos que las primeras semanas no dan materia importante. Así que si te surge algo haces campanita y le pides a tus amigas que te pasen lo que habéis hecho.

4.- ¡QUÉ PALO DA IR A CLASES!! Así que te quedas en casa con muchísimos remordimientos, diciéndote que te cunde más trabajar en casa que en la uni (gran error)

5.- Llega algún examen parcial, así que haces muchísimas campanas para estudiar esa asignatura y te acabas de descolgar del resto.

6.- Ha pasado el parcial y descansas descolgándote más de las asignaturas que ya llevabas atrasadas yyyyyy descolgándote ahora también de la del parcial.

7.- Empiezas a sentirte mal porque se acercan los finales pero no haces nada porque te da ansiedad

8.- Los finales están MUY cerca y la ansiedad sigue tocándote las narices

9.- Empiezas a calcular la cantidad ingente de páginas que debes estudiar en un día para llegar a tiempo

10.- Lloras un poquito

11.- Vas al final leyéndote los apuntes en el bus hecha un matojo de nervios

12.- Pasan los exámenes, reconoces que hubo algunos «fallos técnicos» y te prometes que no te volverá a suceder.

¿Por qué somos así? Bueno, muchos años me he dicho que porque soy una vaga o porque no soy cómo Fulanita (cayendo en comparaciones tóxicas) o porque no soy suficiente… blablabla.

No. Lo que sucede es que la universidad no es solo tu capacidad memorística y organizativa. Es también TU PUÑETERA SALUD MENTAL. Y si entre las fases 2 y 12 no tienes un entorno PERFECTO, motivador, de apoyo, sin altibajos… Pues tienes muchísimas papeletas para que tu fase nº 10 se alargue bastante.

Así que, hagáis cómo lo hagáis este semestre. Empecéis cómo empecéis y acabéis cómo acabéis…recordad esto: UNA RECU NO TE VA A JODER LA SALUD, EL ESTRÉS SI.

Y ahora… A disfrutar, que estamos empezando el semestre y todo es de color de rosa!