Me parecía mentira poder tener unas uñas decentes sin acudir a un centro profesional, ya que siempre he sido mas bien torpecita para este tipo de cosas.

Cosas que no se reducen a pintarme las uñas, podemos incluir utilizar la plancha, tenacillas, o un simple secador y un cepillo a la vez.

Para mi la gente que es tan apañada son dignas de admiración y tienen todo mi respeto.

Desde que estoy en Francia he ido practicando con esto de hacerme la manicura “all by my selfffffffffff…».

celine dion

¡En fin! ¡Volviendo al tema! Pues oye, que parece que, con esto de practicar, ¡le voy cogiendo el truqui!

Pero no es solo gracias a la práctica, ¡sino a un esmalte que me está salvando la vida! Y es con el único que no acabo con toda la mano a lo obra de arte de Picasso.

El caso es que no sólo le voy perdiendo el miedo, sino que ahora incluso disfruto de ello, me he organizado un ritual casero ideal para poco apañadas como yo ¡sencillito pero eficaz!

1. Pídete cita: esto habrá a algunas que le cueste más que a otras, pero en mi caso tengo bastantes huecos en la agenda ¡así que perfecto, me da margen a la improvisación!

2. Prepara todo lo necesario, parece una chorrada, pero si lo tienes todo a mano evitarás que se te olviden pasos y el resultado será mejor

3. Retira el esmalte restante, si te queda algo y no lo has ido perdiendo por el camino como yo, que voy dejando rastro allá por donde voy… Probé de casualidad el de las perfumerías Julia, y me gusta mucho, no tiene acetona y aunque a priori parece caro, merece la pena porque necesitas muy poco y te dura mucho

4. Llena un bol de agua tibia, y yo en mi afán de obtener un resultado profesional, innové con una mezcla personal que me va bastante bien: un poquito de jabón, poco, no queremos un baño de espuma, un poco de crema de manos y una gota de quitaesmalte. Ale, mete las manitas en remojo un ratito y voilà, uñas y cutículas hidratadas y listas

pintura

5. Corta y/o lima, pule y da forma a tus uñas

Elige una buena lima, o más bien tres, o tres en una… Una para darle forma y otra para pulirla y alisarla, pero no dañarla. Vamos la lima de siempre y el taco pulidor que queda muy PRO, y ya si te esmeras, una suavita para dar brillo a las uñas (a mi me gusta una de Sephora que es muy completita)

He leído este consejo que yo desconocía y sin duda tengo que aplicarlo: “lima siempre en la misma dirección, así evitarás que las uñas se laminen” Ok, ¡merci!

6. Pon a raya tus cutículas sin cortarlas, yo utilizo un aceite especial y lo masajeo por todos los deditos antes de desplazarlas con suavidad hacia abajo un poco. Ya he dicho que no soy una pro del tema así que no suelo dedicarle mucho esfuerzo a esto, ¡lo justo y necesario! (este aceite es brutal)

En este punto yo me lavo las manos para retirar posibles residuos y me pongo cremita de manos (no en las uñas) antes de pasar al color.

7. Pinta y Colorea: ¡¡A raja tabla!! ¡Base, dos capas de esmalte y Top coat!

Capitas finas, y yo no sé hacer eso de poner la gotita en el centro e ir desplazándola al lateral blablabla… por eso me es crucial este pintauñas milagroso.

60 Seconds Super Shine Rimmel London

Tiene un cepillo maravilloso que te cubre la uña y nada más que la uña, sin pintarte toda la mano…y encima es de secado rápido.

esmalte

Estos han sido mis rubiconsejos para conseguir un resultado cuasi perfecto en casa, cada una que use los productos que quiera ¡excepto el pintauñas!

¡De verdad que, si ha podido ayudarme a mí, podrá hacerlo con cualquiera!

 

Post NO patrocinado

Enlaces de afiliado