Dime qué cóctel bebes y te diré en qué señora te convertirás

Ni tengo una bola de cristal ni te leo la buenaventura en las cartas, pero sí tengo amigas un poco borrachas. En mi dilatada experiencia como consumidora ocasional y bebedora social, he observado la correlación lógica existente entre la bebida que piden las mujeres de mi alrededor y su actitud frente a la vida ―o como está de moda ahora, ‘la energía que proyectan’―. Este es el fruto de mi concienzudo análisis. ¡Que aproveche!

Aperol Spritz

Desde que viajaste a Florencia no pides otra cosa. Probaste el aperitivi italiano con todo un despliegue de embutidos, quesos y focaccias, y como te sobró comida, pediste que te lo pusieran para llevar. No eras consciente, pero aquel día sentaste las bases de tu yo futuro. Serás la típica señora que en las bodas se lleva un táper para arramplar con el marisco y la tarta con helado y flan (en serio, ¿por qué esa mezcla?). Le dirás a tus nietos “no me coméis nada, ¿os hago un huevo frito? después de unos entrantes, primer plato, segundo plato y postre.

Cosmopolitan

Te hiciste una maratón de Sexo en Nueva York con tus amigas de la uni y desde entonces tu sueño es vivir al más puro Carrie Bradshow. Con la edad te has dado cuenta de que ni tienes un pisazo en el centro de la ciudad ni ropa de marca ni chulazos revoloteándote. De hecho, lo único que compartes con Carrie es ser autónoma y eso, amiga mía, no tiene nada de glamuroso. Da igual que acabes casada, soltera o divorciada, serás la típica señora que va en pandilla con sus amigas al bingo… o a comprar el pan. Que se prepare Benidorm porque seréis las nuevas Chicas de oro.

Mojito 

Nunca has estado en Cuba, pero fue el primer cóctel que probaste en la barbacoa de tu tía Loli y prefieres ir a lo seguro. No te gustan las sorpresas ni las emociones fuertes. Si ahora te quejas de que los niños del vecino son unos escandalosos, dentro de unos años dejarás carteles pasivo-agresivos en el portal. Las discotecas te parecen lugares ruidosos en los que te dan codazos, prefieres el terraceo con un platito de frutos secos. Aspiras a jubilarte en la playa porque amas la tranquilidad por encima de todo, pero en verano te irás a la montaña huyendo del bullicio y los domingueros. Tu lema por excelencia será: “es la primera vez que me siento en todo el día”.

cóctel

Espresso Martini

Funcionaria de día, juerguista de noche, pero igualmente fiel a la raya diplomática, las americanas y el rojo Chanel. No necesitas un código de vestimenta para ir siempre de punta en blanco, es tu tendencia natural. Serás la clásica señora que duerme con rulos, no permite que nadie la vea sin maquillar y que no consiente en cocinar sin delantal, porque la idea de ir con algún lamparón en la ropa le supera. Organizada y cuadriculada, siempre le das a tus invitados un posavasos y algún tipo de marcador para que no se confundan los vasos. Tienes 3 gatos y 50 rodillos quitapelusas repartidos por toda la casa.

Sex on the beach

En el instituto fuiste la más popular y a la universidad llegaste arrasando por la vida, como Thalia. Eres dulce, alegre y caes bien, así que serás la típica abuela que se hace amigui de la nieta y sigue las modas del momento. Tendrás tu casa decorada en tonos pastel, un mandala en la pared y un vinilo gigante de LIVE LAUGH LOVE. Tu guilty pleasure será los realities de reformas de casas y te abrirás una cuenta en Tik Tok en la que ‘recrearás’ coreografías de cuando eras joven. En las ocasiones especiales pedirás que te preparen un Sex on the beach, porque por muchos años que lleves tomándolo aún no te sabes los ingredientes. Spoiler: nunca te los aprenderás.

 

ELE MANDARINA