A mis 34 años pensaba que mi familia era ‘normal’. Padres de clase media, trabajadores, un hermano 4 años menor que yo con el que me llevo muy bien. Nunca ha habido ninguna disputa entre los cuatro. Llevamos una vida familiar bastante tranquila, comemos juntos los domingos, me voy de compras con mi madre de vez en cuando, pasamos veranos en el pueblo, alguna vez vamos al cine..Nada raro, diría que hasta monótono y rutinario. 

Mis padres tienen su grupo de amigos con los que quedan y hacen planes en conjunto y luego cada uno tiene sus ratos de quedar solos con amigos para salir un poco de la rutina familiar. Tanto mi hermano como yo conocemos a todos y cada uno de sus amigos. Nunca hemos notado nada raro, ni sospechado ni imaginado nada raro o fuera de lugar con ninguno de ellos. Todas las amistades que tienen son sanas y normales. 

La mayoría de esos amigos tienen hijos más o menos de mi edad, años arriba o abajo y conozco a muchos de esos hijos, sobre todo los que han sido amigos desde que nosotros nacimos. Los que han llegado a las vidas de mis padres cuando ya era adolescente no he tenido el placer de conocer a sus retoños, supongo que porque cuando ellos se veían yo ya hacía mi vida social también. 

Hace un par de meses recibo un mensaje de mi hermano: llámame cuando salgas de currar, ha pasado algo muy fuerte.

Evidentemente no esperé a salir de trabajar, cuando alguien te manda un mensaje así ya no vives hasta que te enteras que es lo que ha pasado. 

  • He visto a Marta (nombre ficticio. Amiga de mi padres). Iba con su hijo. ¿Tú sabías que tenía un hijo?
  • Sí, habla mucho de él. Pero no vive aquí, creo que está en Bélgica. Tú es que vives en tu mundo y no escuchas
  • Le has visto alguna vez, ¿aunque sea por foto?
  • No, nunca, ¿por qué?
  • Porque es un clon de papá

Le dije a mi hermano que me estaba vacilando y que era un exagerado, pero su seriedad me terminó por convencer. Me quedé en shock y sin saber muy bien que hacer a partir de ese momento. Llamé a mi madre y le pregunté si ella había visto alguna vez al hijo de Marta y me dijo que no. No quise contarle más.

Al día siguiente recibimos un whatsapp en el grupo que tenemos los 4. Era de mi padre que nos decía que fuéramos esa tarde a casa cuando acabáramos de trabajar. 

Allí nos presentamos mi hermano y yo expectantes. 

  • Sé que habéis visto a Miguel el hijo de Marta y creo que ya es hora de que sepáis la verdad. 

Mi madre se empezó a poner nerviosa y nosotros también.

Nos confesó que Miguel era hijo suyo, que tuvo un encuentro sexual con Marta hace 32 años y que se quedó embarazada, que ella quiso tenerlo y él aceptó. Nunca nos había dicho nada porque eso suponía reconocer que había sido infiel a mi madre y no quería perderla por una estupidez de una noche. El miedo en ese momento no le hizo pensar muy bien las consecuencias que la decisión de no contarlo podrían tener años después. Las tardes que decía que se quedaba trabajando eran mentira. Se iba a pasarlas con Miguel. Los viajes que decía que eran de trabajo, también eran mentira. Se iba con su otro hijo. 

Mi madre no abrió la boca en ningún momento. Iba palideciendo cada vez más. Yo cambiaba de emoción a medida que iba escuchándole. Sentí rabia, enfado, tristeza y también alegría. La verdad es que tenía ganas de conocer a mi nuevo hermano y por que no, recuperar ese tiempo que habíamos perdido. Pero sentía tristeza por mi madre, sabía que a partir de ese momento no volvería a confiar en mi padre nunca más. 

Cuando mi padre terminó de dar todas las explicaciones, mi madre, sin mediar palabra, se levantó, se fue a su habitación y cerró la puerta. 

Le dije a mi hermano que nos fuéramos, que ahora ellos tenían que hablar. 

Tres días más tarde recibo otro mensaje de una de mis primas: llámame cuando puedas, tengo que contarte algo.

Que manía tiene la gente con mandarme mensajes así. Obviamente la llamé.

  • He visto a la amiga de tus padres, Marta.
  • Con su hijo verdad?
  • No. Estaba en una terracita con un hombre. Estaban muy acaramelados
  • Pues bien, ¿cuál es el problema?
  • Ese hombre era tu padre

 

 

Relato escrito por una colaboradora basado en una historia REAL.