Atrévete a explorar el pegging y disfruta una nueva experiencia sexual
El pegging, del que apenas se hablaba en voz alta, se ha abierto paso en el vocabulario de la mayoría de los hombres y mujeres
Para algunos se trata de algo simplemente impensable, mientras que otros fantasean con la idea y un importante número la lleva a la realidad con un disfrute increíble.
¿Aún no sabes qué es el pegging? He reunido esta guía clara para que conozcas todo sobre esta práctica.
El pegging es la práctica del sexo anal, pero no él con ella…ni una pareja del mismo sexo, sino algo un poco diferente y es que ella lo penetra a él. Lo que para algunos es extremo para otros es una gran fuente de placer y es que ambos pueden vivir plenamente la experiencia del sexo anal en toda su magnitud.
¿Por qué debería probarlo?
¿Por qué no? Puede ser la mejor pregunta para aquellos que se consideran abiertos a la exploración sexual.
El pegging no sólo es eufórico para las partes implicadas, sino que también es físicamente y emocionalmente muy excitante.
Hay una serie de razones -tanto físicas como psicológicas- que hacen que el pegging sea tan sumamente placentero.
-Estimulación de la próstata en hombres: La próstata es una zona de placer cargada de nervios, y todos los portadores de pene tienen una que es accesible durante la penetración anal.
-Estimulación del clítoris: Cuando se usa un strap-on, la base puede ser muy estimulante, casi como el dry humping
-Estimulación rítmica: Los hombres pueden experimentar un orgasmo prostático con la estimulación rítmica, una acción comúnmente conocida como ordeño de la próstata. Esto puede resultar absolutamente increíble para algunos.
-Cambio de guión: Los hombres no suelen adoptar un papel más sumiso; el pegging puede lograrlo con la energía o la posición adecuadas, y puede ser excitante ser dominado por una compañera. Dicho esto, el pegging no tiene por qué ser tan duro y difícil. También puedes tener una experiencia muy cariñosa y sensual al ser pegado por tu pareja.
Beneficios del pegging
El pegging es una práctica sexual que permite salir de la rutina sexual y, además, mejora la conexión con tu pareja porque es un ejercicio de confianza, comunicación, vulnerabilidad e intimidad.
El pegging está vinculado a la estimulación de la próstata o punto P, una zona erógena muy placentera para las personas con pene y que, con la estimulación adecuada, puede proporcionar orgasmos increíbles.
Normalmente, en esta práctica se produce un intercambio de roles: la persona que normalmente penetra (y muy a menudo tiene pene) es penetrada por una persona con vulva gracias a un arnés que sujeta un juguete sexual.
Ahora que lo conoces, debes saber que es solo una forma más de disfrutar la sexualidad, y puede representar un enorme placer para ambos y la realización de una fantasía sumamente erótica, ¡Todo es posible! Explorad vuestro placer y no os cerréis puertas (si os apetece, claro)
Anónimo
