Yo amo Friends, tú amas Friends, y los que no han visto la serie también aman Friends, pero aún no lo han descubierto. Digamos que casi toda la humanidad forma parte de una religión llamada Friendsismo y para ser miembro debes saber identificar en cualquier película a los actores (extras incluidos) que han pasado por la serie y, más importante aun, tienes que terminar las frases de los personajes, como cuando estás enamorado, pero mejor.
Y aunque somos diferentes, nos une una obsesión. Friends es nuestra vida y “I’ll be there for you” nuestra canción.
Como nada mola más en una religión que ganar nuevos adeptos, aquí os traigo mis motivos por los que Friends es la mejor serie de todos los tiempos.
1. Porque jamás te cansas de verla
He perdido la cuenta de las veces que he visto Friends, pero más de veinte seguro. Es la serie perfecta para cualquier ocasión, puedes ver los capítulos al azar, hacerte un maratón con palomitas o ponerla de fondo mientras haces otras cosas. Da igual, acabarás cantando las canciones de Phoebe de memoria y riéndote con las bromas de Chandler como el primer día.
2. Por sus invitados
Los extras de Friends son lo más. Bruce Willis, Winona Ryder, Brad Pitt, Reese Witherspoon, Elle Macpherson, George Clooney, Alec Baldwin, Danny DeVito, Susan Sarandon, Brooke Shields, Gary Oldman, Sean Penn, y un largo etcétera. Por favor, never forget a Julia Roberts dejando en bragas a Chandler, o a Charlie Sheen interpretando a un tío que no era un salido y un drogado por muy sorprendente que parezca.
3. Por la evolución de Rachel
Deja a su marido en el altar (y menos mal, porque era un capullo) para empezar de cero en la gran ciudad. Todo esto sin el dinero y la aprobación de sus padres. Rachel nos demuestra que puedes cumplir tus sueños si trabajas duro, a veces haciendo cosas que no te gustan como servir café, colocar perchas o acompañar a la costurera artrítica al cuarto de baño.
4. Por la inocencia de Joey
Aparte de un ligón algo capullo con las tías (eso de dejar de llamar sin dar ninguna explicación es un poco feo), es uno de los personajes más tiernos e inocentones de la serie. Recordad cuando creyó que Monica le estaba poniendo los cuernos a Chandler, cuando se enteró de que estaban saliendo y les cubrió durante semanas, cuando le pidió matrimonio a Rachel sin querer, cuando le confesó que estaba enamorado, cuando metió la cabeza en el pavo de acción de gracias para darle un susto a Chandler… Lo siento, no me puedo quedar con una sola escena.
5. Por las excentricidades de Phoebe
Si alguien lo ha pasado mal en la serie es Phoebe. Su padre la abandonó, su madre se suicidó, su padrastro entró en la cárcel y su hermana es una cabrona, pero nada le impide tomarse la vida con sentido del humor y, sobre todo, ayudando a los demás. Solo ella es capaz de recorrerse Manhattan para evitar que el hombre del tóner se suicide, solo ella es capaz de darle 1000 dólares a una mujer sin techo y solo ella es capaz de acoger a una familia de ratas. Phoebe se ganó nuestro corazón con esas excentricidades, y seremos fans eternos de sus canciones, de sus cuadros vivientes y de su casa de muñecas.
6. Por el sarcasmo de Chandler
Si tu día ha sido una mierda, bromea. Si estás en una situación incómoda, bromea. Si te acabas de enterar de que tu esperma tiene poca movilidad, bromea. Si tus amigos han pillado a tu novia enrollándose con su exmarido, bromea. Si dejas el trabajo porque no sabes qué coño quieres hacer con tu vida, bromea. Un comentario sarcástico lo arregla todo, o al menos esa es la filosofía de Chandler, y me parece maravillosa.
7. Por lo mandona que es Monica
La serie tendrá sus fallos y caerá en estereotipos de género más de una vez, pero el papel de Monica hace que se me olvide todo. Desde el primer capítulo demuestra que ella es la que manda, tanto en el trabajo como en su día a día. No os olvidéis que consigue ser la jefa de cocina de un restaurante en el que casi todos son hombres (y no muy amigables precisamente), y que le pide matrimonio a Chandler rompiendo con el estereotipo de que es el hombre el que debe “arrodillarse”. “Si quiero que algo se haga bien, tengo que hacerlo yo misma.” Amén, Monica.
8. Por la inseguridad de Ross
Ross es celoso, infiel y machista, entre otras perlas, pero sobre todo es inseguro. Le corta las alas a Rachel constantemente por miedo a perderla, deja mal a Monica delante de sus padres porque no quiere perder su aprobación incondicional, no quiere tener un niñero porque ataca a su masculinidad y le recuerda las broncas que su padre le echaba de niño por no adaptarse a los roles de género. Básicamente es un ejemplo de lo mal que actuamos cuando nuestras inseguridades hablan por nosotros, así que tomemos nota y aprendamos de sus errores.
9. Porque refleja el amor en todas sus formas
Chandler y Monica, Carol y Susan, Chandler y Joey, Phoebe y Mike, Rachel y Monica, Phoebe y Joey. No hablo del amor romántico, sino del incondicional cariño que hay entre algunos personajes. Al fin y al cabo antes de ser parejas, son sobre todo amigos, y tal vez esa es la enseñanza más importante de Friends.
