Así es, nos da morbo y es que esta pareja, no es una pareja cualquiera, es LA PAREJA.

Y nosotras creemos en el felices por siempre y todo eso de las perdices, vamos, que queremos el cuento Disney para Brad y Jen.

Yo no tengo nada en contra de Angelina, dios me libre, pero la realidad es que me habría encantado que Jen y Brad, Brad y Jen (tanto monta, monta tanto, Isabel como Fernando…) hubieran protagonizado una comedia romántica de esas que hacen ellos, de por vida.

¿Pero, por qué esta insistencia? Insistencia que no es solo nuestra, sino también de todos los medios, e incluso me imagino los comentarios que los pobres tendrán que aguantar en sus cenas de navidad:

“Pues a mí me gustaba más Brad” ¿por qué no volvéis?   “De verdad con lo maja que era la Jenny, si te hubieras portado mejor con ella…”

jennifer aniston

Ellos aseguran que el problema es nuestro porque los teníamos idealizados y ellos simplemente eran, una pareja normal…¡Bueno normal, normal… ejem!

Pero puede ser que tuvieran razón, porque la verdad es, que hoy en día seguimos aferrándonos a la idea de que vuelvan a estar juntos cuando los vemos posar ante las cámaras.

Yo creo que en el fondo estamos enganchadas a su relación cual culebrón venezolano, y somos incapaces de ver la realidad. Que no es otra más, que lo dejaron hace mil  años, no han hecho ni un amago de volver, y que probablemente sea lo mejor para ambos.

Una idea que había tenido para responder este enigma, es que como Brad y Jen rompieron para supuestamente para que Brad empezara otra relación…

Pues simplemente no queremos que eso funcione, así de simple y de complejo a la vez. Pero esta lógica se me viene al traste porque, Brad y Jen cortaron con sus respectivas parejas para estar juntos y me vais a perdonar…

¿alguien se acuerda de Gwyneth Paltrow?

brad pitt

 

Así que echo por tierra esta posible explicación y de momento el único motivo que le encuentro a este enganche, es que nos gusta mucho el drama y el apego, que nos cuesta soltar lo que ya acabó y que nos siguen gustando mucho los finales felices.

¡Si tú tienes una explicación mejor, no dudes en contármela!