Hace tiempo que he ido viendo cierto debate en redes —sobre todo en Instagram— sobre lo que es o no es el body-positive, lo que debería ser, qué tendría que significar…

Pues bien, igual es hora de hablar un poco de nuevo sobre este tema y dejar las cosas claras sobre lo que es, no es, qué quiere transmitir y qué no. Al menos desde mi humilde punto de vista, por supuesto.

¿Qué es lo que mucha gente piensa que es, pero nada que ver?

Promoción —o apología, que esa palabra gusta más— de todo tipo de cuerpo considerado imperfecto, y sobre todo… DE LA OBESIDAD. A ver cuando os ponéis todos obesos perdidos y podemos terminar ya con toda esta farsa, joder.

 

¿Qué es realmente el movimiento body-positive?

  • Aceptar, desde el amor, el cariño, la tolerancia y el afecto TODO tipo de cuerpos. Y eso no hace referencia tan solo a los cuerpos gordos, sino también con cicatrices, amputaciones o cualquier tipo de característica considerada no normativa, y por la cual esa persona sufra discriminación. 
  • Aprender a valorar tu salud mental tanto como tu salud física. Creo que se habla demasiado poco de esto, pero es un tema muy importante y es que hay muchos problemas de salud mental relacionados con la no aceptación de nuestro propio cuerpo. Además, también hay que tener en cuenta los trastornos alimentarios.
  • Alejarse del auto odio y el desprecio a nuestro propio cuerpo, reemplazándolo por amor propio y hacia nuestros bodies. Todo el mundo tiene complejos o partes de su cuerpo que no le gusten por completo, pero no, eso no es despreciar tu propio cuerpo, no es llegar a odiarlo. Ese es un sufrimiento muy doloroso que no puede ser ignorado.
  • No dejar que las imperfecciones te impidan ver tu belleza. Que aquí nadie está hablando de cuerpos perfectos, que aquí de lo que se habla es de destruir el canon de belleza establecido por la industria de belleza, de manera que no exista discriminación por ningún tipo de cuerpo. Que todo el mundo sea igual de bien aceptado y visto. Que todo el mundo encuentre ropa en todas las tiendas. Que no miren mal a nadie por la calle. Que nadie te diga cómo tiene que ser tu cuerpo para que la gente lo considere bello y aceptable.
  • Valorar tu cuerpo por mucho más que solo su apariencia. Hay tantas cosas que nos permiten nuestros cuerpos, pero que pasamos por alto cegadas por el odio. Nos permiten experimentar, sentir, oír, hablar, acariciar, besar, bailar, cantar…
  • No permitir que tu salud mental termine siendo dictaminada por los juicios de terceras personas sobre tu aspecto físico. TENEMOS ESPEJOS EN CASA. De verdad que sí. Todas. Espejos. Nos miramos en ellos. Nos vemos. Sabemos cómo es nuestro cuerpo. Stop comentarios no pedidos sobre los cuerpos de los demás. En serio, ¿cuál es la necesidad? ¿Sabéis lo que significa la palabra empatía, o respeto, o educación, o modales, o no ser un completo gilipollas? Las palabras pueden hacer mucho daño. Y basta ya de “es que no lo dice con maldad”, porque probablemente no lo haga, pero eso no hace que duela menos.
  • Ser conscientes de los estándares de belleza irreales, surrealistas, tóxicos, dañinos y poco saludables. El denominado cuerpo perfecto solo puede conseguirse con Photoshop. No hay mucho más que añadir aquí.
  • Dejar de sentirte culpable y avergonzada por tu cuerpo. No hay razón para sentirse mal por tener unos kilos de más, cartucheras, cicatrices, acné, estrías, las tetas caídas, el culo carpeta… Todas y todos tenemos algo, pero nuestro cuerpo es nuestro hogar. Es el que nos permite todo. No merece que lo tratemos mal. ¿Lo harías con una amiga? ¿La tratarías mal o despreciarías su cuerpo porque no entrara en los cánones que nos imponen? ¿Entonces por qué te lo haces a ti? Para. No es fácil, pero es necesario. Mereces mucho más. Mereces amarte locamente.

Belén Hernández en @beleninprogress