Millenials y no tan millenials, tío Netflix nos ha hecho un regalo navideño adelantado para que disfrutemos como los adolescentes que algunos no dejaremos de ser nunca. Prepara tu manta, compra palomitas y empieza a verla o vuelve a verla hasta el fin (y si es con las personas con las que lo seguiste mejor)
Pablo, Marizza, Mía, Manuel y el resto del ELITE WAY SCHOOL vuelven a la pantalla para hacernos revivir nuestra época más rebelde. Parece que Betty la Fea va a ser destronada por el retorno de este fenómeno argentino que marcó toda una generación en los 2000 en España.
¿Estás preparado para que te vuelva o empiece a marcar?
Allá vamos con las RAZONES que te dejarán con ganas de más:
- Fue y triunfó antes que Euphoria, Élite, Skins…. y antes que la mismísima Rebelde (y que sus fans no me odien, yo no copié nada). Fue un fenómeno de masas que bien mereció su triunfo. Nos dio una razón para ir cada semana a comprar la Super Pop y forrar nuestras carpetas con fotos de sus protagonistas y para comentar cada capítulo en el recreo con nuestros mejores amigos- y estos momentos no nos los quitará nadie nunca.
- Es una serie para todo el mundo. De hecho, recuerdo que un amigo tuvo años colgado en la pared de su habitación a Luisana Lopilato. Y sí, en la calculadora del colegio aún tengo una pegatina de Benjamín Rojas.
- El instituto es divertido, no nos engañemos, pero lo es más cuando todo se convierte en drama. Todos se enamoran de todos. Todos odian (y quieren) a todos. Cada personaje vive su historia paralela y todas ellas se entrecruzan en los pasillos de un internado de niños pijos. Permitirme decir que el concepto que tenía de mi uniforme azul marino del colegio cambió radicalmente desde que esta serie llegó a mi vida y a la de mis amigos y nos hizo adorarlo como un diamante en bruto.
- En la serie existe una guerra de clases entre los “niños de papá” y los “niños de la calle” que te hace posicionarte deprisa y cambiarte de bando tan rápido como de crush de la serie.
¿Eras o serás de Mía Colucci o de Marizza Pía Spiritto? ¿De Pablo Bustamante o de Manuel Aguirre?
- Y no nos olvidemos de las frases para el recuerdo y el mítico “¡qué difícil es ser yo!” que Mía nos hizo y os hará entonar. He de decir que el acento argentino se convirtió para mí en un gran aliciente y cualidad a destacar en los chicos. ¿No me bancás mina? ¡Vos sos tarado!
- ¿Y qué deciros de la BSO? Sus canciones, aunque no demasiado bien cantadas, siempre serán BONITAS, BONITAS, BONITAS DE MÁS. Y es que, te emocionarás cuando comiences a escuchar las primeras notas de un “estamos tan solos, tan apasionados, que es fácil herirnos por cualquier costado, que soñar despierto es un gran pecado” .Vaya con la memoria, no me acuerdo de lo que he comido hoy pero os puedo cantar de principio a fin aquel estribillo de “resistiré, bandera blanca al corazón, resistiré , cualquier ataque a la emoción” , “ quiero quedarme para cosas buenas” o “ será porque te quiero”.
- Pero la razón fundamental…. ¡el amor! De todo tipo: entre amigos, entre padres,entre hermanos, con la pareja ( o varias parejas)…¿ y lo que nos gustan los buenos dramas amorosos qué? ¡Qué ñoña me pone Manuel cuando cantaba “ y te soñé y ya no sé qué me pasó después, solo miré te desnudé…” o qué piel de gallina me pone el “ dije, no voy a volver, no voy a sentir, no voy a pensar y te vi y todo cambió , no pude negarme a tu mirada. Será de dios, que no te pueda olvidar más”.
No puedo aguantar más para volver a verla así que para finalizar y tras animaros fervientemente a enamoraros de todo lo que sucede entre los pasillos del EWS (porque solo pasan cosas bonitas) , solo os digo que :
¡echemos a volar, Rebelde way!
