Que levanten la mano todas las haters de la lechuga.

Es muy fácil decir «tía, pues si no te gusta la ensalada no la comas», pero me gusta innovar en la cocina e ir probando platos nuevos, así que mi enemistad con lo verde siempre me ha traído de cabeza.

Poco a poco he aprendido a incorporar la verdura a mi alimentación y tengo recetas TOP, pero las ensaladas siempre se me han resistido. A comienzos de verano me sentí inspirada y decidí probar algo nuevo, y me gustó tanto que me he vuelto adicta. Hoy os traigo esta receta de ensalada ideal para las que detestamos la ensalada.

Aviso: NO ES VEGANA NI VEGETARIANA.

Ingredientes para una persona

  • Rúcula y canónigos. Podéis sustituirlo por lo que más os guste. ¿La cantidad? Unos 50 gramos o un poco más.
  • Gambones. Suelo comprar un cuarto de kilo. ¿Por qué gambones? Pues porque dentro de los productos frescos, suelen ser lo más baratito. Podéis sustituirlos por langostinos, gambas o lo que os apetezca.
  • Aguacate. Normalmente pongo medio.
  • Nueces. Poned la cantidad que os guste, pero tampoco os paséis.
  • Cebolla. Al igual que las nueces, tampoco hay que pasarse. Suelo poner media y la pico bien finita.

¿Y para aderezar? Una pizca de sal, un chorrito de aceite, un chorrito de zumo de limón y un chorrito de miel.

Resultado de imagen de salad

Truquitos para la preparación

Normalmente lo primero que hago es pelar los gambones, cortarlos un poquito para que no sean trozos gigantes y cocinarlos con un poquitito de aceite.

El aguacate lo corto en daditos y la cebolla la pico muuuuuuy finita.

Luego mezclo todo y a comer. Es tremendamente fácil, tremendamente rápido y está tremendamente rico.

Alternativas si no os gusta algún ingrediente

Lo ideal de una ensalada es combinar carbohidratos, proteínas y grasas. En este caso los carbohidratos provienen de la rúcula y los canónigos, pero podéis sustituirlos por cualquier otra cosa que os guste. Las proteínas del plato provienen de las gambas, y la grasa del aguacate y las nueces. De todos modos os voy a dar una alternativa si no os gusta mucho el marisco.

Sustituid las gambas por pechuga de pollo cortadita en tiras.

También podéis sustituir el aguacate por un huevo o añadir el huevo junto al aguacate. Normalmente en las ensaladas el huevo se pone cocido, pero cuando yo utilizo este ingrediente mi truco es freír el huevo a la plancha con poco o ningún aceite. Igual os parece muy raro, pero la yema del huevo queda jugosita y sirve como aderezo. A mí me gusta mil veces más que cocido, así que os animo a probarlo.

Podéis sustituir las nueces por otro fruto seco como cacahuetes, que tienen un sabor delicioso.

Por último, un truquito es sustituir el aceite de oliva por otro más raro. Yo a veces uso aceite de cacahuete que compro en el Aldi. Le da un sabor delicioso.

Resultado de imagen de salad